Los rojillos fueron eliminados esta temporada a pesar de ganar al Mirandés (1-2), por alineación indebida del jugador Unai García.
Osasuna fue eliminado esta temporada de la Copa del Rey, a pesar de ganar en una eliminatoria a partido único al Mirandés, por alineación indebida del jugador Unai García, sin que el Comité de Competición estimase las alegaciones del club navarro, que fue multado con 6.001 euros y no apeló la sanción.
El conjunto pamplonés alineó de forma indebida el 9 de septiembre en Anduva a Unai García, ya que tenía pendiente una sanción de un encuentro al ser expulsado por doble tarjeta amarilla con Osasuna en el último partido copero de la temporada anterior frente al Alavés.
El Mirandés, que tenía constancia de esa sanción antes de jugarse el partido el pasado mes de septiembre y a su finalización se lo comunicó a Osasuna, solicitó la alineación indebida del equipo navarro, reclamación que fue estimada por el juez de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF).
Osasuna, que cedió a Unai García al Tudelano de Segunda B a mitad de la pasada campaña, admitió que recibió por parte de la RFEF en septiembre de 2014 la notificación de sanción de un partido a Unai García, pero que después esa información se desvaneció por los problemas internos del club, inmerso en un contencioso judicial y con la marcha de los antiguos responsables en estos asuntos.
El presidente de Osasuna, Luis Sabalza, atribuyó la eliminación copera por alineación indebida a "una serie de circunstancias" provocadas por el "sistema de funcionamiento", en el que, según dijo, "no hay ninguna persona responsable" en concreto.
La entidad 'rojilla' lamentó, eso sí, que la Federación Castellano-Leonesa "envió por medio de un fax a todos los equipos la notificación de los jugadores que estaban suspendidos" para esta edición copera, incluido el Mirandés, mientras que la Federación Navarra no lo hizo aunque sí "colgó" la información en su web.
La junta directiva navarra, que indicó que designarían a una persona para que se encargara a partir de entonces de la recepción de los faxes en cuestiones de sanciones, pidió disculpas a la afición osasunista y decidió no acudir al Comité de Apelación.
Osasuna argumentó que no interpondría recurso alguno al entender que la sanción impuesta fue la "mínima posible al no haber castigo añadido ni para el jugador (Unai García) ni para ningún otro miembro del cuerpo técnico".
El club navarro, además de ser eliminado de la competición pese a ganar al Mirandés (1-2), fue sancionado con 6.000 euros, pero dejó de percibir el premio de 22.000 euros por superar la eliminatoria y se quedó sin la posibilidad de recibir ingresos por futuras eliminatorias, por lo que la alineación indebida le costó al menos 28.000 euros.
El juez de Competición de la REFF explicó en su resolución que la sanción de Unai García de la pasada edición copera le fue notificada a Osasuna "al mismo número de fax que curiosamente figura en el membrete inferior del escrito de alegaciones" presentado tras el partido de esta temporada contra el Mirandés.
Además, indicó que el jugador osasunista "en última instancia debería haber sido prudente conocedor de su propia situación personal".
Unai García manifestó tras la eliminación copera que el hecho de salir cedido en enero al Tudelano, meterse "de lleno" en la Segunda B y volver a Osasuna "desde cero" provocó "que no cayese en la cuenta" de que tenía pendiente una sanción.
"Soy consciente de que tengo responsabilidad en el asunto y no se me caen los anillos si tengo que pedir perdón a la afición", afirmó Unai García el pasado mes de septiembre.
