• viernes, 19 de abril de 2024
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PAMPLONA

Aranzadi insiste en 'aprovechar' los atropellos de peatones para promover sus cambios en el tráfico

Han comentado que Pamplona tiene "verdaderas autopistas como la Avenida de San Jorge, la Avenida de Navarra y Pío XII".

El concejal de Aranzadi Aramando Cuenca en un parada de autobús de Pamplona. EUROPA PRESS
El concejal de Aranzadi Aramando Cuenca en un parada de autobús de Pamplona. EUROPA PRESS

Después de las declaraciones de su concejal Armando Cuenca, Aranzadi ha reiterado este viernes su mensaje de modificar el tráfico de la ciudad valiéndose para ello del fallecimiento de un hombre 86 años atropellado por una villavesa en San Jorge. 

Tras lamentar esta muerte, que se produjo el pasado miércoles, ha propuesto más pasos de cebra y carril bus, entre otras medidas, para evitar más atropellos en este punto y otros lugares del barrio.

La candidatura ciudadana ha remarcado que son 13 los atropellos mortales registrados desde el inicio de la legislatura y ha considerado que "ser mayor y peatón en Pamplona es un deporte de riesgo, más si cabe, teniendo en cuenta que seguimos albergando en la ciudad verdaderas autopistas como la Avenida de San Jorge, la Avenida de Navarra y Pío XII".

Precisamente, ha agregado, "se trata de las vías que forman parte del plan de Ejes Sostenibles que Aranzadi plantea desde el inicio de la legislatura y que no ha recibido el apoyo del resto de formaciones del gobierno del cambio de Pamplona".

"El peatón sigue sin tener prioridad en la práctica en la ciudad porque es el coche el que sigue dominando las calles, de acuerdo a los modelos de movilidad caducos de UPN", ha sostenido.

En opinión de Aranzadi, "San Jorge es un barrio que históricamente ha luchado por una movilidad sostenible y, sobretodo, segura para su vecindario". De hecho, ha destacado, "consiguieron amabilizar la enorme rotonda de la Avenida de Navarra, si bien, ahora este soterramiento de los peatones es inaceptable, aunque en su momento fue una victoria vecinal".

"Este barrio siempre ha denunciado que está atravesado por dos autovías, circunstancia contra la que han luchado históricamente y, que les ha llevado a humanizar relativamente la avenida San Jorge", ha destacado.

Desde Aranzadi han propuesto "analizar las líneas de deseo peatonal en la avenida de San Jorge". Y también han destacado que han observado que "hay hasta siete calles de difícil acceso desde la acera opuesta y, que la ausencia de pasos peatonales genera situaciones de peligro en calles como Doctor Simonena, Gortari, Plaza de la Parroquia, Doctor Luzea, Plaza Sanduzelai, plaza de la Estación o la calle de la Estación".

En este sentido, proponen reducir la velocidad a 30 km/h en estas calles, "mediante ajuste semafórico u otras medidas de calmado de tráfico como cojines berlineses".

A su juicio, "también se podría estudiar la posibiliad de dotar a las líneas 7 y 9 de un carril bus en la avenida de San Jorge, cambio que mejoraría los tiempos de ambas líneas, además de descargar presión sobre los conductores".

NO DESCARGAR LA RESPONSABILIDAD EN EL PEATÓN

Desde Aranzadi han remarcado que "el compromiso con la 'Visión Cero' establece que, más allá de las causas concretas de este accidente, la perspectiva de las instituciones y del personal técnico debe responder a esta pregunta: ¿Qué debería haber cambiado en el diseño de esta calle para evitar este atropello mortal?".

Para la candidatura ciudadana, "las causas del accidente nos ayudarán a entender qué ha pasado, pero nunca a descargar la responsabilidad en la edad del peatón, su falta de pericia o en un intangible despiste".

"La parte fundamental de la responsabilidad está en las administraciones públicas, que deben velar porque el diseño sea lo más seguro posible para los más débiles, los peatones", ha apuntado.

A juicio de Aranzadi, "no podemos asumir ni una sola víctima mortal de un atropello como el peaje inevitable que debemos pagar por movernos en coche con total libertad".

"A día de hoy, el diseño del viario está regido por una máxima que entendemos perniciosa: garantizar el flujo ininterrumpido de coches por nuestras calles. Este criterio debe cambiar cuanto antes, sobre todo teniendo en cuenta que el número de atropellos mortales está en ascenso. O preparamos nuestra ciudad -como se hace desde hace años en muchas ciudades europeas- para ser ciudades amables para el peatón, o tendremos que lamentar más víctimas a final del mandato", ha advertido.


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