Varios sectores consultados consideran que podría crearse para atender ámbitos de vivienda o ayudas a autónomos.
Un número importante de los encuestados en Navarra para la elaboración de un estudio de opinión encargado por el Gobierno foral sobre la necesidad de crear un banco público en la comunidad considera que no existe esa demanda "al no existir déficit financiero y más bien al revés, una situación de exceso de crédito".
El estudio agrupa la opinión de 27 agentes de interés e informantes cualificados y ha sido elaborado por la empresa Bizilan, S.A., adjudicataria de este trabajo, que analiza las necesidades de financiación de las familias, las empresas y las administraciones, así como la perspectiva sindical del proyecto y su justificación desde la función social y los valores de las entidades financieras.
Un comunicado del Gobierno informa de que ese estudio, presentado este lunes por la Corporación Pública Empresarial de Navarra (CPEN), apunta que otros sectores consultados sí ven "la necesidad" de crear nuevas líneas de financiación "para atender a los fallos del mercado".
Esas nuevas vías de financiación deberían atender, sobre todo, a los ámbitos "de la innovación, vivienda, emprendimiento, autónomos y ONGs, transformándose de facto en un instrumento de política económica".
La nota destaca que "es ampliamente asumida la idea de la autosufiencia, rentabilidad y sostenibilidad, es decir, la idea de que no puede ser una entidad que como modelo de negocio pierda dinero".
Entre los problemas a los que se debería hacer frente para crear un banco público se citan "las dificultades de los procesos de autorización administrativa (sea Banco de España, sea Banco Central Europeo)", así como "la escasa masa crítica de Navarra (640.000 habitantes) y la limitación de aportaciones y captación de fondos".
