Adame y Talavante han terminado saliendo a hombros por la puerta de las cuadrillas del exigente coso francés.
Luis David Adame es desde este domingo oficialmente matador de toros; en el coso francés de Nimes el joven mejicano ha dejado de ser un novillero para tomar la alternativa. El diestro firmó una seria e importante actuación sobre la arena Nimes con toros de la casa de Núñez del Cuvillo, variada y buena corrida en líneas generales, con un segundo toro y especialmente un quinto excepcionales.
Adame cortó una oreja al mejor astado de la ceremonia, "Sosegado", al que consiguió bailarle con pasajes notables. Mató de un estoconazo recibiendo y paseó este primer trofeo. Complicado fue el sexto, con el que el hasta ahora novillero anduvo muy firme y valentísimo para extraer series de enorme mérito. Otra vez enterró un espadazo a la primera y obtuvo otra oreja. Recorrió el anillo acompañado por el mayoral de Cuvillo, como premio al conjunto.
El mejor par de la tarde fue para López Simón, que logró un galardón con un notable tercero y lo perdió con el acero en el sensacional quinto, con humillación, bravura y fijeza.
Lo mejor de la tarde vino en el primero de Talavante, un buen toro al que el extremeño cuajó una faena extraordinaria. Estuvo a punto de ser herido al trastabillarse al ejecutar una arrucina de rodillas, pero milagrosamente salió indemne del trance. Lo que vino después fue una sucesión de pases por uno y otro pitón de mucha verdad, cadencia y hondura en lo que fue una labor de dos orejas sin discusión. El cuarto, en cambio, fue el "cuvillo" más deslucido de la función, y aquí Talavante quedó inédito.
Adame y Talavante compartieron salida a hombros por la puerta de las cuadrillas. Un nuevo torero ha llegado para quedarse con uno que ya está más que bien afincado en la tauromaquia.
