Desde hace 463 años, el valle navarro y el francés de Cize firman para que los ganados puedan cruzar de un lado a otro de la frontera.
El collado de Organbide, en Iropil, acoge este domingo el Tratado de Compascuidad que realizan desde hace 463 años los valles de Aezkoa y Cize (Francia) para delimitar el terreno de sus pastos comunales.
El acto de la tradicional firma tiene lugar en el crómlech de Iropil, que contiene 30 mojones que simbolizan los 21 pueblos del valle francés de Cize y los 9 del valle navarro de Aezkoa.
Con la renovación de este convenio, que se remonta al año 1556, se asegura que los ganados de ambos valles tendrán igualdad de condiciones para cruzar de un lado a otro de la frontera.
Se trata de un acto simbólico que refleja las relaciones históricas y económicas entre los dos valles de Aezkoa y Cize, y la convivencia que mantienen ambas zonas desde hace años.
Además, este tradicional acuerdo se ha convertido en un ritual de hermandad y de fiesta para ambos valles, que aprovechan la jornada para celebrar una comida y para homenajear a personas que contribuyen al desarrollo social de cada valle.
Este año, la firma del Convenio de Compascuidad coincide con el Bortuaren Eguna, un evento cultural y festivo cuyo objetivo es poner en valor la raza local Manex de cara negra (Manex Tête Noire), promover el oficio de pastor, esencial en la economía local, y reunir a los habitantes de la montaña que viven todavía de la trashumancia.
VISITA GUIADA, CONCURSOS, MERCADO Y COMIDA
El programa festivo arranca con una salida de ocho kilómetros por el entorno, guiada por Patxi Caliot y Fabien Belchit, y después se celebran los concursos de ovejas y vacas, y el concurso de quesos. Más tarde, se abre el mercado de productos locales, como quesos, miel o sidra, de los agricultores y artesanos de los valles de Aezkoa y Cize.
Tras la firma del Convenio de Compascuidad y del aperitivo del mediodía, se celebra la tradicional comida, a cuyo término se entregan los premios a los ganadores de los concursos.
Las relaciones que mantienen los valles de Aezkoa y Cize se han reactivado tras la puesta en marcha del proyecto de cooperación transfronteriza SASC IRATI, un proyecto liderado por las Juntas Generales de Salazar y Aezkoa y las Comisiones Sindicales de Cize-Garazi y Soule-Zuberoa, que tiene como objetivo trabajar conjuntamente en la revalorización del bosque de Irati.
A través de este proyecto, los cuatro valles buscan llevar a cabo una reflexión común sobre la gestión de los recursos y reforzar la cohesión para hacer de Irati un territorio global, a pesar de su carácter transfronterizo. Para lograrlo, han fijado una estrategia de desarrollo territorial duradera, que tendrá en cuenta el conjunto de actividades económicas presentes en Irati.
El proyecto está cofinanciado al 65% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) a través del Programa Interreg V-A España-Francia-Andorra (POCTEFA 2014-2020).
