En España se produjeron entre los pasados 1 de enero y 30 de septiembre 214 muertes en el medio acuático por ahogamientos, una de ellas en Navarra, lo que supone una disminución del 28 por ciento respecto a los 298 fallecimientos registrados en el mismo período de 2020.
No obstante, septiembre ha roto la fuerte tendencia a la baja en los ahogamientos mortales en los espacios acuáticos que se había dado en los dos principales meses del verano, julio y agosto, y con los 31 casos mortales registrados supera los 26 que se dieron en el mismo mes del año anterior.
Los meses de julio y agosto habían dado las menores cifras de ahogamientos en ambos meses desde que en 2015 comenzó a realizarse el informe nacional de ahogamientos de la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo, al igual que había sucedido en septiembre de 2020.
La Comunidad Valenciana, con nueve víctimas, registró casi un tercio de las 31 muertes del mes y es ya el territorio español con más óbitos, tres más que Cataluña, cinco más que Andalucía, Canarias e Islas Baleares y ocho por encima de Cantabria, Extremadura, Comunidad de Madrid y Galicia.
De esta manera, la Comunidad Valenciana se coloca por primera vez a la cabeza de los territorios españoles con más muertes por esta causa, con 40 en los nueve primeros meses del año, dos más que Cataluña, que era la primera en agosto y que ahora registra 38, y también por delante de Andalucía (34), Canarias (21) Islas Baleares (20) y Galicia (13).
Con diez fallecimientos está Extremadura y por debajo de esta cota se encuentran Castilla y León con siete, Comunidad de Madrid y Región de Murcia con seis en cada caso, Castilla-La Mancha y País Vasco con cuatro en cada territorio, Aragón y Cantabria con tres en cada comunidad, Asturias dos y La Rioja, Navarra y Melilla con uno.
El perfil de la persona ahogada en lo que va de año es el de un hombre (79 %), español o de otro país de Europa (48,6 %), mayor de 65 años (38,7 %), que fallece principalmente entre las 10.00 y las 20.00 horas (80 %), en una playa (58 %) o en un espacio acuático que no tiene vigilancia (88 %).
