Tal vez por que hacía demasiado frío, o quizá porque la música que sonaba captó la atención de muchos jóvenes, pero una patrulla de la Policía Municipal de Pamplona no daba crédito a lo que presenciaban en un bar del Casco Antiguo de Pamplona.
Y es que, en el interior del establecimiento había 159 personas cuando el aforo permitido, según la licencia de apertura del bar, era de 41; con el evidente riesgo en caso de cualquier suceso.
El informe está datado a las 12.15 de la madrugada del sábado al domingo, cuando una patrulla observó demasiada gente en un bar de reducidas dimensiones de la calle San Francisco del casco viejo de Pamplona. Al entrar en el local, automáticamente cortaron la música y los agentes iniciaron el protocolo para este tipo de casos: desalojar el establecimiento.
En total, excluyendo el personal, había 159 personas, casi cuatro veces más de lo permitido, por lo que se procedió a denunciar al establecimiento por el incumplimiento de la normativa.
En estos casos, si el exceso de aforo se produce fuera del horario establecido de apertura, se eleva una nueva sanción, pero no era el caso, de manera que se permitió al local seguir abierto, eso sí, controlando que no hubiera más de 41 personas en su interior.
Esta ha sido una de las 244 intervenciones de Policía Municipal de Pamplona a lo largo del fin de semana en la que el cuerpo ha destacado las 34 de ayuda a personas que la necesitaban en la vía pública. Y apostillan al respecto que, muchas de ellas, intoxicadas por alcohol, en un fin de semana en el que este tipo de intervenciones ha sido un poco más elevado de lo habitual.
Los agentes han participado también en 54 ocasiones por problemas de convivencia y 15 más por molestias a los vecinos. Asimismo se han disuelto siete peleas y se han detectado seis conductores con tasas de alcoholemia positivas. Tres de ellos se llevaron una sanción administrativa y otros tres una citación judicial por ofrecer una tasa de alcohol superior a 0,60 y por lo tanto, ser constitutiva de delito.
