Todos los caminos de acceso al Parque Natural de Bardenas se encuentran cerrados al tránsito de vehículos a motor.
La crecida del río Ebro a su paso por la Ribera de Navarra está dejando imágenes impresionantes de campos y carreteras anegados por el agua.
El paraje desértico de las Bardenas Reales tampoco se está librando de sufrir las consecuencias de las extensas riadas y, prueba de ello, es que el agua ha llegado casi hasta el Castildetierra o ha convertido uno de los barrancos en una gran catarata de agua que impresiona.
Por el momento, todos los caminos de acceso al Parque Natural de Bardenas se encuentran cerrados al tránsito de vehículos a motor debido al temporal de lluvias, según ha informado la Comunidad de Bardenas Reales de Navarra en una nota.
La prohibición se mantendrá, ha añadido, hasta que pueda evaluarse la situación de daños y restablecer su uso sin riesgo para los usuarios.
Los ganaderos y agricultores que requieran acceder por motivos inaplazables deberán ponerse primero en contacto con los servicios técnicos de la Comunidad para que pueda "controlarse el acceso con mayores garantías de seguridad".
La información de última hora apunta que el caudal máximo del Ebro llegará con retraso hasta Tudela (sobre las 15 horas), aunque sus efectos ya dejan varias carreteras cortadas y la Unidad Militar de Emergencia ya prepara su intervención en alguno de los seis tramos más afectados de la Cuenca del Ebro.
