La pequeña, que seguía a su madre por la casa, cerró la puerta del balcón sin poder luego abrirla.
Un suceso curioso y anecdótico es el que recuerda esta mañana de miércoles la Policía Municipal de Pamplona, que se hace eco de una llamada que tuvieron que atender este martes 20 de septiembre a las 13 horas. Ocurrió en Buztintxuri, en Pamplona.
En un piso de este barrio, una niña de 18 meses encerró a su madre en el balcón. La mujer quedó atrapada en el espacio hasta que llegaron la policía y los bomberos y pudieron rescatarla.
Los agentes se bastaron únicamente de dos acciones: proceder a abrir la puerta del domicilio y, de forma ininterrumpida, hacer lo propio con la del balcón.
Concretamente, fue una vecina la que dio la voz de alarma a los servicios de emergencia puesto que era consciente y tenía la seguridad absoluta de que tanto la madre como el bebé se encontraban dentro del domicilio. Nadie contestaba a sus timbrazos y se impacientó.
Tal y como se conoció después, la pequeña seguía a su madre por la casa cuando esta entró en el balcón. Fue entonces cuando la niña cerró la puerta del mismo sin poder luego abrirla. La mujer, que vivió un momento de angustia pensando en que su hija estaba sola merodeando por las habitaciones del piso, esperó más de media hora hasta su rescate.
El final de la historia es feliz, pero nadie reniega de esos minutos de incertidumbre, que se quedan en el susto y la anécdota.
