Bildu exige a Sánchez la transferencia de Prisiones a Navarra para acelerar la excarcelación de etarras

La socialista María Chivite ha sido investida este martes presidenta de Navarra gracias a la abstención de los diputados de Bildu. El PSOE liga así, una vez más, el futuro de esta comunidad a los proetarras, que serán decisivos para sostener la legislatura. En su largo listado de exigencias, el partido de Arnaldo Otegi prioriza dos asuntos: la cuestión territorial – es decir, la celebración de un referéndum- y la situación de los presos etarras. Es ahí donde Bildu quiere ir más allá de los pasos dados hasta ahora por el Gobierno socialista, y reclama la transferencia completa de Prisiones, como ya dispone el País Vasco. El objetivo, y no lo ocultan, es que los etarras puedan ser excarcelados con el acceso al tercer grado penitenciario.

Desde 2021, Navarra dispone de la competencia de la sanidad penitenciaria. Pero los socios de Chivite creen que hay que ir más allá. Lo recogen así en su documento ideológico, consultado por OKDIARIO: «Asunción de todas las competencias en materia penitenciaria para desarrollar nuestra política propia penitenciaria». Consideran que el «sistema penal actual, basado en la justicia punitiva, se ha revelado claramente insuficiente, puesto que en buen numero de casos no satisfacen las necesidades de las víctimas ni tampoco se consiguen efectos resocializadores efectivos».

Por ello, defienden un modelo de Justicia «propio y autóctono», adaptado, dicen, «a una sociedad abierta y plural como la del presente siglo».

Con el traslado de todos los presos etarras a las cárceles del País Vasco y Navarra -que el Ministerio del Interior completó en marzo de este año-, la reivindicación de Bildu se centra ahora en acelerar la concesión de permisos y excarcelaciones. El Gobierno Vasco, por ejemplo, asumió en octubre de 2021 la competencia de Prisiones, y ello ha derivado en un incremento de las concesiones de semilibertad. La Fiscalía ha recurrido varios casos. Entre los últimos presos que han tenido que regresar a prisión está Joseba Borde, condenado a 200 años de prisión por tres asesinatos. En febrero de este año, los jueces revocaron también el tercer grado al etarra Asier Carrera, condenado entre otros por accionar el mando a distancia del coche bomba con el que ETA asesinó al dirigente socialista Fernando Buesa y a su escolta, en 2000.

También el ex dirigente de ETA Joseba Arregi, Fiti, tuvo que regresar a prisión tras revocarle la Audiencia Nacional el tercer grado concedido por el Gobierno vasco. El etarra fue condenado por su participación en una quincena de asesinatos a penas que sumaban más de 2.500 años de prisión.

Investidura

Este martes, María Chivite ha sido investida gracias a la abstención de Bildu, lo que le ha permitido lograr la mayoría simple necesaria en la segunda votación.

En su intervención durante la primera sesión del debate de investidura, Chivite lanzó numerosos guiños a los proetarras, en especial en la cuestión lingüística.

Así, reivindicó la «diversidad» de Navarra en materia de lenguas y apostó por «impulsar un amplio acuerdo social y político en torno al euskera». El líder de UPN, Javier Esparza, advirtió a la socialista que Bildu «subirá el precio de su apoyo».

En efecto, la formación de Otegi ha elevado la presión sobre el PSOE y, como ya avanzó OKDIARIO, reclama ahora que se aborde el debate sobre un referéndum en Navarra para decidir sobre su adhesión a los «territorios vascos». Además, Chivite ha prometido impulsar la ley para el «reconocimiento y reparación» de los proetarras que se declaran «víctimas» de la «violencia policial».