Una tarde en Roncesvalles en plena pandemia de Covid: las imágenes del Camino 'desierto'

A las 19.15 en punto Bibiano junto a otros 4 sacerdotes comienzan las Vísperas. Uno de ellos lleva más de 38 años como sacerdote en esa localidad y otro, de nacionalizad polaca está ultimando su tesis doctoral. PABLO LASAOSA
Durante las vísperas, cada uno ocupa su sitio a los dos lados del altar. Dos a un lado y otros tres al otro. PABLO LASAOSA
Ataviados con libros de culto, uno de ellos lee en voz alta mientras otros lo escuchan atentamente. El sacerdote polaco no suelta el rosario de sus manos. PABLO LASAOSA
Steve, de Estados Unidos lleva andando desde Alemania, sin dinero y durmiendo en la calle desde noviembre. Este peregrino pasa las horas en la Iglesia de la Virgen de Roncesvalles, sosteniendo un Rosario mientras los alterna con un libro de oraciones. PABLO LASAOSA
Tras terminar con un rosario, los sacerdotes acceden a la sacristía del templo para vestirse minutos antes de comenzar la Eucaristía. PABLO LASAOSA
Los 5 curas residentes se han dedicado a rezar por esta situación durante el confinamiento. Pedían por el covid, los fallecidos, enfermos, personal sanitario y los peregrinos. Hacían vida contemplativa, ya que no se podían desplazar a los 30 pueblos que atienden en la zona más despoblada de Navarra. PABLO LASAOSA
En años anteriores, de media pasaron por ahí más de 55.000 peregrinos, el pasado 2020 únicamente menos de 8.000 y la mayoría españoles. PABLO LASAOSA
Las únicas dos personas que asisten a la celebración son dos peregrinos. PABLO LASAOSA
El invierno ha sido largo, no ha venido nadie. Este año, al ser Jacobeo estaría a tope, comenta Bibiano en una iglesia que solo alberga a dos personas personas, que están de paso. PABLO LASAOSA
Un sacerdote se prepara para dar comienzo a la Eucaristía que ofrecen todos los días a los peregrinos. PABLO LASAOSA
La iglesia de Nuestra señora de Roncesvalles, vacía a expcepción de dos peregrinos. PABLO LASAOSA
“La iglesia siempre la hemos tenido abierta, no se ha cerrado ni en el confinamiento aun sabiendo que no venía nadie, desde las 8 de la mañana hasta las 9 de la noche” explica Bibiano. PABLO LASAOSA
Un silencio sepulcral reina en la iglesia a la salida de los 5 sacerdotes a oficiar la Misa. Los dos peregrinos se dejan entrever por los bancos del final. PABLO LASAOSA
Steve, peregrino que viene desde Alemania, comulga durante la Misa. PABLO LASAOSA
Hace unos días una pareja de alemanes se decidía a comenzar el Camino. Desde la propia institución se les recomendó volver a su país de origen y así lo hicieron. PABLO LASAOSA
El invierno ha sido largo, no ha venido nadie. Este año, al ser Jacobeo estaría a tope, comenta Bibiano en una iglesia que solo alberga a dos personas personas, que están de paso. PABLO LASAOSA
Roncesvalles, pensado para atender al peregrino, está viviendo esto con mucha pena, como en todos los sitios, más cuando este año 2020 se cumplían 800 años de la consagración de la Iglesia de Roncesvalles. PABLO LASAOSA
Al finalizar la Misa, los 5 sacerdotes se retiran a sus quehaceres mientras el chico polaco termina de ordenar el altar. PABLO LASAOSA
Al haber un cierre perimetral, el camino también está cerrado y por ende, los locales y albergues dedicados a los mismos. PABLO LASAOSA
Desde Roncesvalles no podemos más que aconsejar a la gente que tiene que volver a sus lugares de origen, pero tampoco vas a dejar a nadie que duerma en la calle, más cuando está nevando, añade Bibiano. PABLO LASAOSA
Poco a poco va llegando el toque de queda de las 23:00 y Roncesvalles queda desierta, como si no viviera nadie mientras el frío y la humedad se extiende por cada rincón. PABLO LASAOSA