Balonmano

España y Dinamarca demuestran carácter de campeón en la primera jornada

. Gonzalo Pérez De Vargas, entre dos contrarios de Alemania. Efe.

El combinado nacional español doblegó a la inexperta Alemania por 32-29 en el debut del Campeonato de Europa que se disputa en Polonia.

Las selecciones de España y de Dinamarca confirmaron su condición de aspirantes al título, tras debutar en el torneo con dos trabajadas victorias sobre Alemania y Rusia, respectivamente, que demostraron que españoles y nórdicos poseen mimbres y, sobre todo carácter, para pelear por el oro.

Una madurez que permitió a España solventar su debut en el torneo con un sufrido triunfo (32-29) sobre la joven y pujante Alemania, en un encuentro en el que ni las exclusiones, ni la tarjeta roja con la que fue castigado Jorge Maqueda, alteraron el pulso a los de Manolo Cadenas.

España sobrevivió, incluso, a las altas expectativas de juego que ella misma se había impuesto, tras su deslumbrante fase de preparación, y que condicionaron el arranque del conjunto español, que tardó en ajustar su sistema defensivo.

Una defensa que como quedó demostrado ante Alemania es la pieza sobre la que se sustentan las opciones de medalla del equipo español, y que ante los germanos, sólo durante momentos puntuales en el primer tiempo, dejó ver su auténtico potencial.

Tampoco mostró su versión más redonda Dinamarca, que tuvo que esperar a los últimos diez minutos de juego para acabar de doblegar definitivamente (31-25) a una selección rusa, que llegó al descanso con empate (13-13) en el marcador.

Pero ni el buen hacer del lateral Sergey Shelmenko, autor de cinco tantos, pudo impedir finalmente el triunfo de un equipo danés, en el que destacó además del siempre acertado Niclas Landin, que cerró el choque con un 44 por ciento de paradas, el joven Michael Damgaard.

Un resultado que sitúa a Dinamarca en la primera plaza del grupo D, aunque igualado a puntos con Hungría, que se impuso este sábado por 32-27 a Montenegro, en un encuentro que los magiares dejaron ya encarrilado a los seis minutos, tras arrancar el choque con un contundente parcial de 5-1.

Renta que los del español Talant Dujshebaev supieron manejar con solvencia hasta el final (32-17), gracias al acierto del lateral de origen iraní Iman Jamali, autor de cinco tantos, y, sobre todo, del pivote Bence Banhidi, máximo realizador del partido con siete dianas.

Por su parte, el veterano guardameta Mattis Andersson fue el gran protagonista del inesperado triunfo (23-21) que el conjunto sueco cosechó hoy ante una Eslovenia, que se estrelló contra el muro en el que se convirtió el portero escandinavo.

El 43 por ciento de paradas que firmó el cancerbero sueco, impidieron a los balcánicos culminar la espectacular remontada que protagonizaron en la segunda mitad, en la que los de Veselin Vujovic llegaron a perder hasta por ocho goles de diferencia (18-8).