Lo que comes cada día influye en tu riesgo de enfermedades graves según investigadores
La Sociedad Española de Aterosclerosis (SEA) ha presentado este jueves un documento que destaca la importancia del estilo de vida y la alimentación en la prevención de las enfermedades cardiovasculares. Más allá de los avances científicos y tecnológicos, la base de la salud cardiovascular radica en intervenciones individuales y comunitarias, según recoge el informe.
En los últimos seis años, se han publicado más de 8.200 estudios sobre la dieta mediterránea, desmontando la creencia de que solo las dietas bajas en grasa son beneficiosas. El presidente de la SEA, Carlos Guijarro, ha resaltado que España cuenta con el "privilegio" de esta cultura alimentaria, considerada el patrón ideal para la prevención de patologías del corazón.
El médico de familia y miembro de la SEA, Carlos Pascual, ha señalado que el aceite de oliva virgen extra es la grasa "más saludable" para la salud cardiovascular. En contraste, ha desaconsejado el consumo de aceites de girasol, maíz y soja.
El documento subraya la necesidad de consumir cinco raciones diarias de frutas y verduras, preferiblemente de temporada y proximidad, para reducir la huella de carbono. También recomienda patatas en platos mixtos con carnes, verduras o pescado hasta tres veces por semana y advierte que los cereales refinados, como el pan blanco o el arroz, solo son perjudiciales si no se combinan con otros alimentos que reduzcan su índice glucémico.
Los frutos secos, en cantidades de 30 gramos diarios o el equivalente a un puño, deben incluirse en la dieta al menos tres veces por semana. Siempre es preferible que sean crudos y sin sal, ya que aportan grasas saludables y proteínas.
El informe recomienda consumir pescado y marisco hasta tres veces por semana, priorizando el pescado azul en dos de estas raciones como sustituto de la carne. En cuanto a los productos lácteos, se aconsejan dos raciones diarias, tanto en su versión desnatada como entera, evitando aquellos con azúcares añadidos.
Los especialistas también han desmitificado la mala fama de los zumos sin azúcar añadido y han recomendado el consumo de cacao con al menos un 70 % de pureza, hasta 30 gramos diarios. Además, consideran que tomar hasta cinco tazas de café al día sin azúcar puede aportar beneficios para la salud.
A pesar de las controversias sobre el consumo de huevos, el informe aclara que cocinarlos con aceite no aumenta el riesgo cardiovascular y que, aunque la yema contiene colesterol, no es tan perjudicial como se creía. También se destaca el valor nutricional de las legumbres (garbanzos, lentejas y alubias), recomendando su ingesta dos o tres veces por semana.
En el caso de las carnes, el consumo máximo recomendado es de cuatro veces por semana, dando prioridad a la carne blanca sobre la roja y evitando los embutidos y productos ultraprocesados. Además, se advierte que las carnes vegetales procesadas tampoco son una opción saludable.
El informe recalca que la sal es uno de los mayores enemigos de la salud cardiovascular, por lo que se aconseja limitar su consumo a cinco gramos diarios y optar por alternativas como hierbas aromáticas, especias o ajo.
También se desaconseja el consumo de bebidas alcohólicas, aunque se reconoce que las fermentadas como el vino o la cerveza son menos perjudiciales. Aun así, la recomendación es clara: el mejor consumo es cero.
Las bebidas azucaradas quedan en entredicho, ya que aumentan el riesgo de obesidad, diabetes y enfermedades cardiovasculares. Incluso las versiones con edulcorantes pueden ser nocivas.
El investigador emérito de IDIBAPS, Emilio Ros, ha destacado que seguir una dieta basada en vegetales, como la mediterránea, podría reducir la huella de carbono en un 10 %, permitiendo alimentar a más personas con los mismos recursos agrícolas.
Ros ha citado un estudio de 'The Lancet', que prevé que España será el país con mayor esperanza de vida en 2040, lo que ha vinculado con la adherencia a la dieta mediterránea.
Por último, el informe señala que el exceso de sal, el bajo consumo de cereales integrales y de frutas son algunos de los factores alimenticios con mayor responsabilidad en los fallecimientos a nivel mundial.
El documento también apunta a la Inteligencia Artificial como una revolución en la nutrición, ya que permitirá detectar con precisión los alimentos y nutrientes de una dieta, incluso en platos combinados, gracias a herramientas de reconocimiento visual.
Este estudio reafirma la importancia de adoptar una alimentación saludable basada en la dieta mediterránea para la prevención de enfermedades cardiovasculares y la mejora de la calidad de vida.