Los médicos en Navarra muestran su rechazo a la ley de los medicamentos y productos sanitarios
El Sindicato Médico de Navarra, junto a la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (AMYTS) y otras entidades, ha mostrado este martes su rechazo a la actual redacción del anteproyecto de ley de los medicamentos y productos sanitarios, por considerar que habilita "de forma incorrecta a múltiples profesiones sanitarias a la prescripción y modificación de tratamientos médicos".
Por ello, se insta al Ministerio de Sanidad y al Gobierno a "revisar y modificar esta propuesta legislativa para proteger los derechos de los pacientes y mantener la calidad del sistema sanitario".
Según han destacado en un comunicado, el tratamiento y prescripción médica "es competencia de médicos, odontólogos y veterinarios en sus respectivos ámbitos de actuación y con responsabilidad última sobre sus procesos, tal como dice su nombre, y establece el artículo 6 de la Ley 44/2003 de Ordenación de las Profesiones Sanitarias (LOPS)".
"La definición competencial está definida en la Ley de ordenación de profesiones sanitarias; y esta modificación legislativa pretende invadir la delimitación profesional de la LOPS. La prescripción médica es el resultado de una evaluación compleja del paciente, y está integrada entre las funciones de diagnóstico, prevención y pronóstico, para las que se requiere una formación amplia y una visión global del paciente", han apuntado.
A su juicio, este anteproyecto "presenta un punto de inflexión y cambio de rumbo radical, en el que se extralimita la prescripción (médica) sin restricciones concretas a múltiples profesiones, contradiciendo la definición competencial de la LOPS".
"Se trata de dar capacidad de prescripción de medicamentos con peligrosidad, riesgo de uso anormal y tratamientos parenterales a colectivos con menor formación y capacitación en el ámbito de la fisiología y la farmacología humana y que, por tanto, no pueden ofrecer las garantías necesarias en cuanto a la calidad y control de los efectos de la prescripción", han advertido.
Esto, han dicho, "podría derivar en errores terapéuticos, comprometer el equilibrio del tratamiento y afectar directamente a la salud y el bienestar de los pacientes". Según han destacado, la Plataforma de Pacientes ya ha manifestado "su malestar" al respecto.
"Defendemos el modelo sanitario basado en la especialización, en el que la prescripción de medicamentos debe ser competencia exclusiva de los profesionales con formación específica para el diagnóstico y tratamiento de patologías. Esta ley supone una clara invasión de competencias, desdibujando el papel de los facultativos y alterando la estructura de un sistema sanitario basado en la especialización y el rigor científico", han reivindicado.
En este sentido, como organización sindical profesional, y "entendiendo que las cosas no son ni blancas ni negras, consideramos que este anteproyecto sigue la senda del emborronamiento de competencias que está causando confrontación desde hace tiempo entre los colectivos profesionales, dándole apoyo explícito el gobierno".
"No observamos en la definición de competencias profesionales ofrecida por la ley ninguna que pueda justificar la utilización de medicamentos para el tratamiento de enfermedades por profesionales diferentes a los médicos, tanto agudas como crónicas, y entendemos por ello que se está fomentando una extralimitación de competencias, con invasión de las propias de los médicos, por otros colectivos profesionales", han criticado.
A su juicio, "otorgar la capacidad de prescripción sin definir exactamente a qué competencias profesionales corresponde dicha capacidad en diferentes profesiones sanitarias, e incluso sin detallar el catálogo de productos a prescribir dentro de esas competencias, no puede sino suponer inseguridad jurídica para los profesionales y abrir la puerta a procedimientos judiciales que pueden tener resultados dolorosos y perjudiciales tanto para las personas como para las instituciones, en base precisamente a esa indefinición competencial".
Con la actual redacción, el anteproyecto "desdibuja las competencias de ambas profesiones, incurriendo en el riesgo de invasiones competenciales que, con la excusa de la dificultad para cubrir las ya de por sí exiguas plantillas de médicos y facultativos, se procediera a sustituir parte de sus funciones por otras categorías profesionales (profesionales de enfermería, profesionales farmacéuticos) con los consiguientes riesgos de selección por parte de contratadores por razones de disminución de costes de personal en lugar de por razones clínicas basadas en la evidencia científica".
"Consideramos que el SNS tiene enormes fortalezas y que se puede avanzar en su sostenibilidad y gobernanza mediante el desarrollo completo de las actuales competencias profesionales mediante la colaboración y el diálogo", han comentado, tras animar a médicos y pacientes a participar en la audiencia pública del anteproyecto hasta el 8 de mayo.