Vecinos de Pamplona ayudan a detener a dos ladrones: un policía usó un patinete eléctrico en la persecución
La Policía Foral ha detenido en la última semana a ocho hombres, todos ellos argelinos y marroquís, como presuntos autores de distintos delitos de robo con fuerza y violencia o intimidación, todos ellos con ingreso en prisión tras pasar a disposición judicial.
Los últimos arrestos se han producido el pasado fin de semana en Pamplona, donde cinco hombres fueron enviados a prisión por varios robos. Entre ellos se encuentran tres jóvenes detenidos en el Casco Antiguo, acusados de robar un teléfono móvil y de intentar sustraer una cadena mediante violencia. A ellos se suman otros dos individuos, de 24 y 26 años, detenidos en el barrio de San Jorge tras un asalto con violencia e intimidación.
Este último suceso ocurrió el domingo por la tarde durante un patrullaje preventivo. Vecinos alertaron a una patrulla uniformada de que dos varones habían robado un bolso por la fuerza y huían a la carrera. Gracias a las indicaciones del vecindario, los agentes iniciaron la persecución, que tuvo tintes poco habituales.
En un momento dado, un ciudadano cedió su patinete eléctrico a un policía, que continuó la persecución sobre el vehículo. Mientras tanto, otro agente subió como copiloto en el coche de una vecina para seguir a los sospechosos. Finalmente, ambos varones fueron detenidos en puntos distintos gracias a la rápida actuación policial y a la colaboración ciudadana.
En el registro posterior, los agentes recuperaron el bolso robado y hallaron además una riñonera con una decena de teléfonos móviles cuya procedencia no pudieron justificar los detenidos.
Tras su paso por el Juzgado de Guardia, se decretó el ingreso en prisión de los arrestados.