Josebas, la UCO y el pegamento del dinero: el aberchandalato de Navarra y la corrupción

¿Y ahora qué hacemos, Josebas? ¿Qué quieres que hagamos con lo tuyo, cuéntanos?

Siendo director del Boletín Oficial del Noticias, me habéis levantado varias veces el dedico, faro moral del aberchandalato, por descojonarme de toda esta txarka que hay montada en Nafacroa. Ayer me volví a descojonar un huevo, confieso, con todas las noticias y con todos los titulares, incluso con los suplentes, pero a estas playas yo ya llego desfondado, como los náufragos que bracean solos en mitad del océano.

O casi solos, que hay una cuadrilla de autistas navarros entre los que me cuento, pasándolo pipa en Tuiter con todo esto y que han braceado durante años mucho, muchísimo, demasiado, en completa soledad. Un saludo, arroba Urederriano, por decir uno que es el paradigma de todos, que lleva años ordenándonos las informaciones, analizándolas y relacionándolas entre sí, para que los que somos dispersos como yo y tendentes a desconectar no nos perdamos en el lío que es todo este culebrón político-mediático-social del aberchandalato foral y que va aflorando, por fin.

En otro lado tendría el Pulitzer; aquí, ni una docena de castañicas asadicas de la locomotora de la calle Comedias. Irroña, esa madrastra contra la tercera Navarra, la que está oculta y desamparada, de la que les he hablado mil veces.

En fin, sigamos. Lo primero que pensé es que lo que más le iba a joder del informe de la UCO es que nos íbamos a enterar todos de su verdadero nombre, José Ramón, que lo de Josebas es solo un nombre artístico. Josebas, el artista antes conocido como José Ramón, aparece en el informe de la UCO de Cerdán: presuntas citas, presuntas compras de participaciones de Servinabar por parte de su hijo menor, presuntas presuntos, presuntos prosciutos, que es como llaman al jamón que le echan los italianos —los inventores del asunto familiar presunto— a las pizzas.

Por lo demás, en el informe de la UCO se lee lo de siempre: PSOE, Navarra y corrupción, como la que ya vimos con Roldán y Urralburu, pero esta vez añadiendo a la salsa a los aberchándales, que no hay nada que una más que el pegamento del dinero de las comisiones. Muy presunto, recuerden, que el Josebas anda guardando tuits, cabreado como un mono. Todo nació de Navarra y se lo llevó Sánchez después a Madrid: pactos con los aberchándales y mordidas, ¡presuntas!

¿Y Txibite, presidenta de la Navarra comida por los presuntos, las presuntas, las comisiones, los chanchullos, los apaños, los amigos, los compañeros de partido, los compañeros aberchándales de los otros partidos, los pactos entre todos ellos, las adjudicaciones sospechosas de obra pública de su Gobierno, la mierda a borbotones…? ¿De todo esto no sabía nada? ¿Su única defensa va a ser hacerse la rubia? Que a lo mejor no es mala, oye, yo qué sé; que, si ha llegado hasta ahí arriba aupada por toda esta cuadrilla de Cerdanes que tienen montado este sistema sin hacerse preguntas de por qué la izan sobre ese pavés inmoral que corroe su partido y su Gobierno, a lo mejor piensa que es lo que le puede salvar de la quema.

En cualquier caso, tendría que haber dimitido hace mucho tiempo, pero a ver dónde iba a cobrar esa pasta que gana como presidenta de Navarra, que no se entera de nada. ¿En Servinabar?

En fin, vaya puta tropa. Y eso es todo.