El reto que ha llenado de sonrisas las calles de una localidad de Navarra con la ayuda de más de 50 negocios
Más de mil sonrisas de alumnos, profesorado y familias decoran los escaparates de Estella en una campaña del colegio Santa Ana por el Día Internacional de la Sonrisa.
El colegio Santa Ana de Estella ha impulsado una iniciativa con motivo del Día Internacional de la Sonrisa que ha logrado implicar a más de 50 comercios de la localidad. El objetivo ha sido convertir la ciudad en una gran galería de alegría, colocando cientos de carteles con sonrisas en los escaparates.
La propuesta, bautizada como el “Reto: Llenar Estella de sonrisas”, ha contado con la participación de alumnado, profesorado, Hermanas y familias del centro. El pasado 1 de octubre, el colegio entregó en cada negocio una cascada de sonrisas acompañada de frases personalizadas, creadas para cada comercio en función de su actividad.
Así, en la Peluquería Maite Sanz se puede leer “Pelo bonito, sonrisa brillante”, mientras que en Jordana Hogar la frase elegida ha sido “El mejor despertar: una sonrisa”. En total, más de mil sonrisas impresas y más de 50 lemas distintos se exhiben desde esta semana en Estella.
Además de las cascadas, cada escaparate incluye un cartel promocional con un código QR que enlaza a la explicación de la campaña en castellano y euskera. De este modo, cualquier vecino puede conocer el proyecto y sumarse al mensaje positivo.
La directora del colegio, Adriana Goñi, ha subrayado que “la sonrisa es la herramienta de comunicación más valiosa: reduce el estrés, mejora el estado de ánimo y nos une”. Por ello, desde el centro educativo han querido que este gesto tan simple se convierta en un elemento de conexión con toda la ciudad.
Con esta iniciativa, los espacios comerciales de Estella se transforman en un escaparate de la felicidad. “Queremos que cada persona, al pasar por un comercio, reciba un chispazo de energía positiva y recuerde la importancia de sonreír cada día”, destacan desde el colegio.
La propuesta también busca ser un juego intergeneracional, que conecta a pequeños y mayores con un gesto universal capaz de traspasar barreras. Desde el colegio Santa Ana agradecen la colaboración de los comercios y esperan que la campaña se difunda para llegar a más personas.