FIESTAS

Las vacas se vuelven al corral: la ganadería de Teodoro Vergara le pone picante al último encierro del Pilón

Octavo encierro del Pilón de Falces 2025 con vacas de la ganadería Teodoro Vergara. IRANZU LARRASOAÑA
La manada ha descendido la cuesta a una velocidad de vértigo y es ahí, en la curva, donde se han visto imágenes preciosas de mozos valientes.

Falces ha despedido los encierros del Pilón de 2025 con una carrera rápida de las vacas de Teodoro Vergara, que repetían en el cartel; y no han defraudado. De hecho, las vacas se han dado la vuelta y han regresado al corral, poniéndole picante a la última carrera de los encierros de Falces de 2025. (Ver la galería de fotos).

El encierro, pese a que ha sido rápido, ha sido también largo; y no, no es un contrasentido. La cuestión es que la manada ha salido del corral y se han vuelto prácticamente a los diez segundos, justo al llegar a la primera zona con presencia humana.

Las vacas de Teodoro se han encerrado en el corral mientras los pastores acudían con la intención de azuzarlas para que salieran. Han estado dentro casi dos minutos cuando una vaca negra ha asumido el liderazgo de la manada y ha salido cuesta abajo.

Sus hermanas le ha seguido, pero en el mismo punto en el que se giraron la primera vez han vuelto a pararse. En ese punto parecía que el encierro iba a ser mucho más picante de lo que al final ha sido, pero no. Pese a que una vaca se ha quedado rezagada y ha hecho todo el recorrido cabeceando a izquierda y derecha, no ha habido que lamentar percances.

La manada ha descendido la cuesta a una velocidad de vértigo y es ahí, en la curva, donde se han visto imágenes preciosas de mozos valientes que se han metido en el centro del recorrido y han aguantado algún segundo extra ante las vacas a una velocidad endiablada. El encierro ha durado 3 minutos y 22 segundos, pero sí descontamos el tiempo que las vacas han estado paradas, apenas ha pasado del minuto.

Al final, y según el parte facilitado por la DYA, el encierro se ha saldado con dos corredores heridos, uno de ellos por un golpe en la cabeza contra el vallado que no reviste mayor gravedad, y otro por erosiones leves tras una caída.