Osasuna comienza a ejercitarse para un mes clave en busca de la permanencia
El conjunto rojillo se mide contra cuatro rivales directos en la lucha por conseguir la salvación.
La plantilla de Osasuna comienza este lunes la preparación de un mes fundamental para su intereses en el que disputarán cinco encuentros cruciales para tratar de lograr el objetivo de la permanencia antes de mayo.
El equipo rojillo ha regresado a los entrenamientos de manera individual tras los tres días de descanso que han disfrutado los pupilos de Jagoba Arrasate. Los navarros han vuelto a Tajonar para ejercitarse por individual a modo preventivo y en cumplimiento del protocolo sanitario de LaLiga.
Los futbolistas han ido llegando de forma escalonada a las instalaciones. Primero se han realizado un test de antígenos, en el que todos han resultado negativos, y posteriormente a una PCR. Está previsto que la plantilla retome el trabajo colectivo tras tener los resultados de esta segunda prueba.
La mañana ha constado de una activación, trabajo preventivo, técnica y carreras. El buen tiempo ha facilitado una plácida sesión.
Por su parte, Jony, Íñigo Pérez, Rubén Martínez y el argentino Facundo Roncaglia han proseguido con su plan específico para restablecerse de sus respectivas lesiones.
Budimir y Moncayola siguen sin poder por contar para Arrasate. El croata y el internacional Sub-21 con España, tienen mañana sus respectivos compromisos ante el combinado maltés y checo.
Este martes, Osasuna regresará al trabajo con la mente puesta en su próximo rival, un Getafe de Pepe Bordalás que intentará llevarse los 3 puntos de El Sadar el sábado a partir de las 18:30 horas.
UN MES CLAVE
Getafe, Villarreal, Valencia, Celta y Elche serán los rivales a los que los hombres de Jagoba Arrasate deberán hacer frente para conseguir sacar el mayor número de puntos posibles y sellar, o al menos acercarse, a la ansiada salvación.
Los de Tajonar han acumulado 30 puntos hasta la fecha en 28 jornadas en las que han atravesado por distintas dinámicas. Los 13 partidos sin ganar no fueron motivo suficiente para prescindir de Arrasate, un entrenador que contó con la total confianza de la directiva rojilla en ese tramo de la Liga.
El golaveraje podría ser una de las claves al final de la competición y Osasuna lo tiene perdido con Getafe (1-0) y Villarreal (1-3), a la vez que empatado con Valencia (1-1) y Elche (2-2) y ganado con el Celta (2-0).
La distancia de 7 puntos respecto del primer puesto de descenso que ahora mismo marca el Eibar, no debería ser motivo para la relajación de un equipo que lleva dos empates a cero consecutivos ante dos adversarios muy directos como Valladolid y Huesca.
La valentía y el atrevimiento que acostumbraba a desplegar Osasuna la temporada pasada ya son historia. La necesidad de llenar la mochila poco a poco ha hecho que en determinados choques el cuadro navarro no haya salido a buscar a su oponente a quemarropa.
Osasuna debería dar un paso hacia adelante para sacar sus partidos de forma más cómoda, buscando el área rival con más ahínco. Un gol en cinco fechas es el pobre bagaje ofensivo de los de Arrasate, es decir, 450 minutos para recoger el balón de las mallas contrarias en tan solo una ocasión.
El trastabillado gol de Kike Barja que supuso la victoria de Osasuna en Mendizorroza por 0-1 el 27 de febrero, es la última vez que la hinchada osasunista se ha levantado de su sofá para celebrar un tanto.
La importancia del mes de abril cobra mayor relevancia si se mira los clubes con los que deberán lidiar los de Tajonar en mayo. Real Madrid y Atlético de Madrid están llamados a luchar por LaLiga Santander hasta, probablemente las dos últimas jornadas, mientras que la Real Sociedad y el Athletic de Bilbao buscarán meterse en Europa League a toda costa.
La complejidad de estos duelos queda patente por la entidad y la buena campaña que todos ellos están realizando. El Cádiz, será el equipo que visite El Sadar el 12 de mayo con la idea de sumar tres puntos que le puedan acercar a la salvación en su regreso a la máxima categoría 15 años después de su última participación.
Se espera que el regreso del argentino Chimy Ávila con el grupo 14 meses después de su primera lesión, ayude a su equipo con goles y que su particular energía contribuya a mantener a la centenaria institución un año más entre los más grandes.