Chivite, acorralada e irritada tras la dimisión de Alzórriz, defiende que ella no sabe nada sobre ningún tema
María Chivite dice no saber nada. Es presidenta del Gobierno de Navarra y secretaria general del PSN, pero asegura que desconocía que Santos Cerdán manejaba una empresa a la que su propio Ejecutivo adjudicó una obra de casi 70 millones de euros.
Tampoco sabía, según ha dicho este jueves en Pamplona, que su número dos en Navarra y portavoz parlamentario, Ramón Alzórriz, tenía colocada a su pareja en esa misma empresa: Servinabar.
Así se ha presentado este jueves ante la prensa: como una presidenta que no se entera de nada, tras la dimisión de Ramón Alzórriz, vicesecretario de Organización del PSN, al que ha defendido y ha dicho que no ha cometido ningún delito.
Irritada, altiva con los medios y tratando de esquivar cualquier responsabilidad, Chivite ha evitado dar explicaciones claras sobre los casos con olor a corrupción que rodean a su Gobierno y a su partido.
Ha asegurado que actuará “caiga quien caiga” tras el informe de la UCO de la Guardia Civil, y ha defendido que ya ha cumplido con esa promesa con la salida de Alzórriz, quien le comunicó este miércoles que su pareja había trabajado en una de las empresas investigadas. Aun así, Chivite ha declarado que no tiene “argumentos para dimitir”.
“Dije ‘caiga quien caiga’ y estoy cumpliendo”, ha afirmado ante los medios en una breve comparecencia antes de entrar al pleno del Parlamento de Navarra.
“Avancé el empeño, como presidenta y como secretaria general, de garantizar la limpieza y la honorabilidad tanto del Gobierno como del PSN. Y efectivamente ha sido así con el caso del compañero Ramón. Dije ‘caiga quien caiga’ y así es como estoy cumpliendo”, ha insistido.
Chivite ha confirmado que Ramón Alzórriz seguirá como parlamentario cobrando del dinero público y que este viernes celebrarán una Ejecutiva extraordinaria para nombrar un sustituto como portavoz parlamentario.
Según ha explicado la presidenta, Ramón Alzórriz le comunicó este miércoles "una información que era desconocida y, por lo tanto, tiene que asumir también las responsabilidades del error que ha cometido". "No quiero que quede ninguna duda de la honorabilidad de mi partido ni de la honorabilidad de mi gobierno. Este es el empeño en el que estoy, con triple auditoría y desde luego llegando hasta el final de cada una de las informaciones que vayamos conociendo", ha manifestado.
Preguntada por qué Alzórriz sigue como parlamentario tras dejar su cargo como vicesecretario general del PSN y portavoz parlamentario, Chivite ha indicado que "la cuestión ha sido una pérdida de confianza y, por lo tanto, se renuncia a los cargos de confianza".
Cuestionada sobre el hecho de que ella no supiera nada sobre el trabajo de la pareja de Alzórriz, la presidenta ha respondido: "¿Cuesta creer? Pues que cueste creer, pero es la verdad. De hecho, ayer me lo hizo saber y ayer se tomó la decisión", ha destacado.
Chivite ha explicado que este viernes el PSN celebrará una ejecutiva para elegir al nuevo portavoz parlamentario del partido. También tendrá lugar una sesión de Gobierno extraordinaria para acordar que el Ejecutivo foral se persone en la causa contra Cerdán "como posible parte perjudicada".
María Chivite ha defendido que "no hay ni un solo informe jurídico, de auditoría, de informaciones policiales que van saliendo, que apunte a ninguna ilegalidad cometida en ninguna adjudicación y en eso me mantengo". Así pues, ha considerado que "no hay argumentos para dimitir". "Ningún indicio de ilegalidad escrito en ningún sitio, en ningún informe. Unos presupuestos que sacar adelante, un proyecto y un acuerdo de Gobierno que sacar adelante", ha subrayado.
Preguntada si las dimisiones de Cerdán y Alzórriz afectan al Ejecutivo foral, Chivite ha contestado que "ni Santos Cerdán ni Ramón Alzórriz son miembros del Gobierno de Navarra" y ha llamado a "separar las cosas". Ha remarcado que "Ramón Alzórriz no ha cometido ningún delito" sino "el error de no comunicar algo que podría ser relevante, por tanto, no pongamos las cosas en el mismo plano porque no lo son".
"Estoy empeñada en defender la honorabilidad de mi partido y del Gobierno que presido. Y esa es la tarea en la que estoy empeñada y que la voy a llevar hasta sus últimas consecuencias", ha insistido.