Los dos investigadores de la UPNA que desarrollan una tecnología capaz de eliminar virus en el aire
Dos investigadores de la UPNA desarrollan un filtro capaz de esterilizar el aire y eliminar virus como el SARS-CoV-2
Los profesores Alberto López Ortega y Eneko Garaio Urabayen, del Departamento de Ciencias de la Universidad Pública de Navarra (UPNA) e investigadores del INAMAT2, han participado en un estudio que ha dado como resultado una tecnología pionera para esterilizar el aire y eliminar virus en espacios cerrados.
El trabajo, publicado en la revista Advanced Science, está liderado por el Institut Català de Nanociència i Nanotecnologia (ICN2), el Institut de Microelectrònica de Barcelona (IMB-CNM), el IRSI Caixa y el Institut de Recerca Germans Trias i Pujol (IGTP), con colaboración de la UPNA y la Universitat de Barcelona.
El hallazgo plantea una alternativa innovadora frente a los sistemas más habituales, como los filtros HEPA o la radiación ultravioleta, que presentan limitaciones en eficacia y mantenimiento.
La investigación se ha centrado en desarrollar filtros de acero inoxidable ferromagnéticos y superhidrofílicos, capaces de calentarse mediante inducción electromagnética hasta alcanzar entre 60 y 80 grados. Ese calor permite atrapar y desactivar virus, bacterias y microcontaminantes presentes en el aire, ofreciendo un sistema reutilizable, de bajo consumo y fácil integración en sistemas de ventilación.
Los investigadores de la UPNA se encargaron de la caracterización magnética dinámica de los filtros, un proceso clave para definir las condiciones óptimas de funcionamiento. “Analizamos cómo responden bajo campos alternos y determinamos las frecuencias y amplitudes necesarias para lograr un calentamiento rápido, homogéneo y estable”, explican.
El funcionamiento consiste en que el aire contaminado atraviesa el filtro, donde las microgotas que contienen virus se absorben y se evaporan rápidamente en la superficie caliente. El resultado es la liberación de aire limpio y vapor de agua con un consumo energético inferior a 30 vatios.
Las pruebas en laboratorio de bioseguridad de nivel 3, en el Institut Germans Trias i Pujol, confirmaron una eficacia superior al 99,6% frente a virus como el SARS-CoV-2 (variante Ómicron) y el virus respiratorio sincitial (RSV). Además, los filtros han demostrado su capacidad para retener microplásticos y otros contaminantes orgánicos, lo que refuerza su versatilidad.
Otro de los puntos destacados de esta innovación es su capacidad de autolimpieza y regeneración a través de un proceso pirolítico, que permite mantener su eficacia durante al menos 10 ciclos. Esta característica reduce residuos y costes y facilita su aplicación en hospitales, escuelas, oficinas o transporte público.
El proyecto cuenta con dos patentes internacionales y ha sido reconocido con el Premio AMES-Joan Antoni Bas de I+D+i en el ámbito de la pulvimetalurgia. Los responsables del estudio destacan que se trata de un paso decisivo hacia sistemas de purificación del aire más seguros, sostenibles y eficientes.