SOCIEDAD

Las mejores bodegas de Navarra para acercarse a la cultura del vino con una visita guiada

Bodegas Pago de Larrainzar
Muchas bodegas en Navarra hacen visitas guiadas a sus instalaciones, algunas construidas sobre modernas instalaciones a los pies de viñedos centenarios, y otras tradicionales.

La cultura del vino está de moda. Navarra siempre ha sido una región de excelentes vinos y sus bodegas han estado a la vanguardia de estas modas, ofreciendo no sólo sus ricos caldos al mercado y exportándolo por todo el mundo, sino también atendiendo a todos esos curiosos que quieren conocer de cerca como son los procesos de elaboración desde la viña hasta las barricas.

Muchas bodegas en Navarra hacen visitas guiadas a sus instalaciones, algunas construidas sobre modernas instalaciones a los pies de viñedos centenarios, y otras tradicionales, incluso rodeadas de cultura y arte en torno al cual el vino siempre ha jugado un papel determinante.

De entre todas, algunas bodegas destacan por lo ameno de su visita guiada, por la atención y conocimientos de sus guías, por lo detalloso de sus explicaciones, incluso por la calidad de los pinchos y tapas con los que acompañan a sus vinos.

Son docenas los motivos por los que puede gustar más o menos una visita a una bodega y los clientes dejan sus opiniones en plataformas de turismo gastronómico como Trip Advisor, que recoge las mejor valoradas por los propios usuarios. Son las siguientes: 

  1. Bodegas Pago de Larrainzar
  2. Bodegas Caudalia
  3. Bodegas Otazu
  4. Bodegas Manzanos
  5. Pagos de Araiz

 

Bodegas Pago de Larrainzar

Bodegas Pago de Larrainzar

Aprender puede ser apasionante, sobre todo si el marco es un hermoso viñedo entre el Monasterio de Irache y Montejurra. Los grandes ventanales de Pago de Larrainzar se abren para desvelar el alma y el secreto del buen vino a través de una visita guiada por el viñedo, el innovador Jardín Vitivinícola y la bodega. Y después, con la tranquilidad que exige, disfrute de la cata guiada de sus vinos para ver, oler y saborear el maravilloso entorno.

Bodegas Caudalia

Bodegas Caudalia

Bodegas Caudalía es una pequeña y familiar bodega ubicada en Lerga, en el epicentro de la Historia navarra, con el Castillo de Javier, el Monasterio de Leyre, la ciudad romana de Santa Criz de Eslava o el pueblo atalaya de Gallipienzo hacia el Este; las ciudades medievales de Olite y Ujué hacia el Sur. Entre cepas y olivos centenarios podremos disfrutar del vino, del paisaje, de vestigios romanos y medievales.

Bodegas Otazu

Bodegas Señorío de Otazu

Bodega Otazu se encuentra a 8 km de Pamplona, en un pequeño valle atravesado por el río Arga y rodeado por las sierras del Perdón y del Sarbil. Su origen se remonta a 1840, cuando se construyó en Navarra la primera bodega de estilo château francés. Está convertida a día de hoy en museo del vino y galería de arte contemporáneo y ha sido enriquecida con las últimas tecnologías de elaboración, crianza y embotellado. Arquitectónicamente, destaca su espectacular sala de barricas internacionalmente conocida como la Catedral del Vino. Todos los vinos están elaborados exclusivamente con uvas procedentes de las 116 hectáreas de viñedo propio que rodean a la bodega.

Bodegas Manzanos

Modegas Manzanos

Bodegas Manzanos se ha proyectado desde un primer momento como un espacio abierto a las visitas y a la organización de eventos, con el objetivo principal de difundir la cultura del vino. Situadas en Azagra, en un entorno privilegiado, cargado de historia y en el que la naturaleza está presente en todo momento, Bodegas Manzanos está pensada para disfrutar de las vistas, degustar las comidas y los vinos tradicionales de la zona y compartir momentos agradables e inolvidables. La bodega cuenta con un Departamento de Enoturismo y Eventos preparado para recibir, ilustrar y hacer partícipes a los visitantes de todo el trabajo que conlleva la elaboración del vino.

Pagos de Araiz

Bodegas Pago de Araiz

Pagos de Aráiz es una bodega joven, libre y natural situada a escasos kilómetros de Olite. La finca, de 400 hectáreas de terreno, dedica 240 hectáreas a viñedos propios que rodean la bodega y sus instalaciones, configurando un estilo francés de bodega “château” con estupendas vistas de la zona. Sus vinos proceden a partir de una materia prima propia excelente y la combinación entre los métodos tradicionales y la más avanzada tecnología, además de elaborarse con el máximo respeto al medioambiente, tanto en el viñedo como en la bodega. Visitar Pagos de Aráiz es adentrarse conocer la cultura del vino, descubrir obras de arte del siglo XVI y dejarse llevar por una completa experiencia vinícola.