Sociedad

Los vecinos de Marcilla vuelven a salir a las calles y exigen el cierre del centro de menores: “¡Basta ya!”

Los vecinos de Marcilla se manifiestan para pedir el cierre del Centro de Observación y Atención (COA). CEDIDA
La ciudadanía se ha concentrado este domingo 15 de junio para denunciar la situación “insostenible” que vive el pueblo desde la apertura del Centro de Observación y Acogida.

Los vecinos de Marcilla han alzado la voz este fin de semana para exigir el cierre del Centro de Observación y Acogida (COA) del municipio, donde actualmente residen menores extranjeros no acompañados.

La protesta, celebrada el domingo 15 de junio, ha reunido a decenas de ciudadanos que, de forma firme pero pacífica, han expresado su hartazgo ante los continuos altercados que, aseguran, están sufriendo desde hace tiempo.

El pasado jueves 13 de junio ya lanzaron un contundente comunicado en el que los marcilleses advirtieron que la situación se ha vuelto insoportable.

En ese escrito, los vecinos denunciaron robos, vandalismo, peleas, acoso y una creciente sensación de inseguridad en sus calles. “Marcilla ya no es un pueblo tranquilo”, lamentaron.

También, el 14 de junio se concentraron para protestar por los enfrentamientos registrados en los últimos días. Durante la concentración, se escucharon consignas como “Chivite escucha, aquí está la lucha”. 

Durante la manifestación de este domingo, la ciudadanía ha leído un manifiesto en el que se ha apelado a la dignidad, la justicia y la seguridad, dejando claro que la movilización “no es por odio, ni por rechazo, sino porque se ha abusado de la generosidad del pueblo”.

En sus palabras, el ambiente de solidaridad que caracterizó a Marcilla en la acogida inicial de estos menores se ha transformado en una convivencia rota por la falta de control y la impunidad con la que, aseguran, actúan algunos de los jóvenes alojados en el centro.

“Tenemos miedo de que nuestras hijas vuelvan solas a casa, miedo de salir a la calle, miedo a que cualquier noche se convierta en un infierno de ruidos, gritos o sirenas policiales”, han declarado. Según los vecinos, el COA se ha convertido en el foco de “un sin sentido” que, a su juicio, el Gobierno de Navarra no ha sabido gestionar.

En el comunicado leído durante la manifestación, la ciudadanía ha pedido a las autoridades que dejen de lado los estudios y las promesas y tomen medidas inmediatas. “Exigimos al Gobierno de Navarra que cierre el COA y que lo cierre ya. Si no lo hace, será el único responsable de lo que pueda pasar”, han advertido.

El pueblo, de unos 3.000 habitantes, lleva meses denunciando la situación. Tal y como recordaron este domingo, han avisado en numerosas ocasiones de lo que estaba ocurriendo y consideran que se ha llegado a un punto de ruptura con la convivencia. “Este pueblo ha dado más de lo que le corresponde. Y lo ha hecho con el corazón. Pero también decimos hoy, alto y claro: ¡Basta ya!”, proclamaron entre aplausos.

Por el momento, ni el Gobierno de Navarra ni el Departamento de Derechos Sociales han respondido públicamente a las peticiones de cierre del centro. Los vecinos, sin embargo, aseguran que seguirán movilizándose hasta obtener respuestas y soluciones que les devuelvan la tranquilidad: “Marcilla merece vivir en paz. Merece caminar sin miedo. Merece soluciones, no excusas”, concluyeron.