¿Navarra diversa e inclusiva?
Italia ha aprobado recientemente el llamado pin parental, también llamado consentimiento informado, que garantiza a las familias el derecho a ser informadas y a decidir sobre determinadas actividades que afectan a la educación moral de sus hijos. Allí se apela al sentido común. Aquí, en Navarra, se prefiere mirar hacia otro lado.
Hace poco, un padre de familia me ha contado que en el colegio de sus hijos se impartían contenidos de educación sexual con los que no estaba de acuerdo. Así que reclamó su derecho a educar a los hijos conforme a sus valores y creencias. Pero la respuesta ha sido clara: o se llevaba a sus hijos a otro colegio o claudicaba. No había más opciones.
No se trata de algo aislado. Otras familias se han visto también obligadas a cambiar a sus hijos de centro. En estos casos no falta quien comenta: “si no les gusta, que se paguen su propia educación”, aludiendo a que se vayan a la escuela privada. Pero conviene recordar que tanto la escuela pública como la concertada se sostienen con los impuestos de todos los ciudadanos, también de aquellos que discrepan.
De paso, convendría recordar que en otros países existe el cheque escolar: dinero público que los padres pueden usar para escolarizar a sus hijos donde quieran, un sistema que aquí no interesa a nuestros gobernantes.
Son cuestiones razonables y de pura lógica. Sin embargo, en España, y de manera especial en Navarra, las autoridades se niegan a conceder estos derechos a las familias. Lo hacen, precisamente, quienes presumen de defender la diversidad, una de las palabras estrella de los programas de coeducación, pero que vemos que aplican solo cuando les conviene.
Por el contrario, pretenden que todos los padres pasen por el mismo aro y que eduquen a sus hijos con el modelo del Gobierno. Y, de no hacerlo, que se paguen su propia educación privada. Muy inclusivo, otro de sus vocablos preferidos. Quieren una sociedad inclusiva donde el que no está de acuerdo con quienes detentan el poder será excluido.
Carta enviada por Ignacio Del Villar (Familias por la Libertad de Educación - FamiLiaE).