A Bordalás hay que jugarle con las mismas armas

Ante Budimir dispara para marcar en el partido de Osasuna contra el Getafe en el Coliseum. EUROPAPRESS
He creído que Osasuna tendría un poco más de ambición a partir del empate, pero no, prefirió mantener el empate, que por poco se esfuma en el último minuto.

Partido para comprobar si la victoria sobre el Barcelona fue sólo una casualidad o el equipo se ha asentado ya en la competición; además, el Geta ha sido para Osasuna un hueso duro de roer, y hoy no iba a ser menos. Queremos olvidarnos de los tres goles de la temporada pasada, los tres de cabeza y dos de ellos de córner rematados en el primer poste; ¿habremos aprendido?

Osasuna con la alineación más fuerte que tiene el entrenador en este momento, su esquema habitual en el campo, y una posición holgada en la clasificación, quiere dejar claro desde el inicio que desea, como mínimo, puntuar y creo que así ha sido.

El ya habitual 4-1-4-1 con posibilidades de defender y jugar por las características de los rojos, pero solo eran intenciones. El juego que plantea Bordalás es el de siempre en sus equipos: pelea constante por el balón arriba en medio y abajo.

Esta forma de plantear el juego le lleva al Getafe en todos los partidos a disputar todo, convertir el partido en una pelea constante y aprovechar las situaciones de balón parado; hoy de nuevo nos han hecho gol de esta forma, para más risa, de fuera de banda; ¡qué despiste!

En la primera parte los números era de risa: 70% de posesión para Osasuna, 12 faltas el Getafe por 2 de Osasuna, un tiro de cabeza: gol, lección muy aprendida. Por parte de Osasuna ya sabe que va a un encuentro donde el lema es “patada a seguir” como en el rugby, el balón ha de estar lo más lejos de la portería.

En la segunda parte Osasuna no le coge el aire al encuentro, aunque se le ve más dispuesto a la pelea; no obstante, siguen ganando los azules los duelos, especialmente los de cabeza.

Menos mal que en una de esas jugadas bien llevadas, Bryan Zaragoza da un gran pase a Budimir para que haga un gran gol y conseguimos el empate.

He creído que Osasuna tendría un poco más de ambición a partir del empate, pero no, prefirió mantener el empate, que por poco se esfuma en el último minuto. El equipo ha estado a la altura en la pelea constante, pero creo que tiene más capacidad de juego de cara al gol y que hoy no ha sabido o querido demostrar.

Si tuviera que aconsejar algo a los rojillos, sería: vayan a las disputas con más fe; y ensayen un poco más “la anticipación”; después vendrán otras cuestiones y un mejor juego del equipo.

A Bordalás hay que jugarle con sus mismas armas, si no eres muy superior. De todas formas, es un buen punto para la clasificación.