Las obras del nuevo parque de Pamplona avanzan a buen ritmo y revelan cómo será su diseño verde
Las obras del parque de Magdalena avanzan en los tres espacios donde se desarrolla la fase 3.1, una intervención iniciada en agosto que continúa transformando el entorno situado al sur de la Chantrea y junto al límite con Burlada. La Gerencia y la Comisión de Urbanismo han visitado esta mañana el área para revisar sobre el terreno las líneas principales del proyecto, ya visibles gracias a los movimientos de tierras y al perfilado de caminos. Esta fase cuenta con una inversión de 2,063 millones de euros.
En el espacio sur, en el entorno del Camino de Burlada, se encuentran los trabajos más adelantados. Allí ya está realizado el perfilado de tierras, pendiente únicamente de la última capa vegetal. También se han completado los muretes y vallados que lindan con las parcelas de la carretera de Burlada, así como los futuros caminos que unirán la calle Privilegio de la Unión con el Camino de Burlada, tanto en sentido longitudinal como transversal, y que necesitan solo la capa final de pavimentación.
En la zona central, quienes integran la comisión han conocido el progreso de las futuras pistas multideporte, un espacio de 34 x 21 metros que se está ejecutando sobre la subbase. En este mismo ámbito se han levantado ya la cimentación y el armado de los muretes previstos para las gradas. En continuidad con la plaza Mª Carmen Húder, al otro lado del vial, los caminos ya están definidos, aunque falta la pavimentación final. Además, los viveros cuentan con la reserva de arbolado necesaria para acometer la plantación en el primer trimestre del año, dentro del periodo vegetativo adecuado.
En el ámbito más próximo al término municipal de Burlada —la zona este— ya se han ejecutado tareas de movimiento de tierras y de preparación de los futuros caminos, incluidos los accesos hacia la calle Privilegio de la Unión. También se trabaja en la creación del futuro bosquete natural. Respecto al domo geodésico previsto en una de las plazoletas, la instalación se coordina con la Escuela Taller para llevarla a cabo cuando la pavimentación de la plaza esté lista.
Los trabajos actuales se integran en el desarrollo global del parque, cuyo diseño nació de un concurso de arquitectura con participación ciudadana celebrado en 2017. Desde entonces se han ejecutado dos fases completamente operativas. La primera, desarrollada entre agosto de 2020 y abril de 2022, sumó 24.000 m² de zonas verdes y recuperó la antigua noria de sangre, con un coste de 2,36 millones de euros. Las obras fueron realizadas por Construcciones Lacunza Hermanos.
La segunda fase concluyó el pasado verano a cargo de Excavaciones Fermín Osés. Añadió 22.000 m² y nuevas áreas de juegos, estancias peatonales, así como remates y el paseo de borde de la calle Privilegio de la Unión. La inversión fue de 2,18 millones de euros.
La fase 3.1 —que es la que se está ejecutando ahora y que ha motivado la visita institucional— fue adjudicada en junio también a Construcciones Lacunza Hermanos, por 2.441.044 euros y un plazo de ejecución de doce meses. Su finalización está prevista para julio de 2026.
Tras completarse esta parte, quedará únicamente la fase 3.2, que se desarrollará frente a los edificios de viviendas. Incluye la creación de huertos sociales con casetas de aperos, servicios y una gran pradera. Con esta última intervención el parque alcanzará un total de 100.000 m² de superficie verde continua, con cerca de un kilómetro de longitud y 100 metros de anchura entre la calle Privilegio de la Unión, el río Arga, Magdalena y el límite con Burlada.