Fin a las goteras en uno de los edificios con más visitantes de Pamplona: las obras empiezan tras San Fermín
La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Pamplona ha aprobado el proyecto de impermeabilización de la estación de autobuses, una intervención valorada en 4,1 millones de euros, con un plazo de ejecución estimado de 10 meses y la previsión de que finalice en abril de 2026. Las obras no conllevarán el cierre parcial ni total de la estación.
Además, se ha dado luz verde a la petición del área de Conservación Urbana para que los trabajos comiencen tras las fiestas de San Fermín. Los costes de la obra y la gestión técnica correrán a cargo de la UTE Estación de Autobuses de Pamplona / Vectalia S.A., empresa concesionaria de la infraestructura.
El proyecto cuenta con el visto bueno de las áreas municipales de Urbanismo, Proyectos y Movilidad y Conservación Urbana, y ha recibido también la autorización de la Institución Príncipe de Viana, ya que los elementos fortificados sobre los que se actúa están catalogados como Bien de Interés Cultural y Monumento Histórico Artístico Nacional.
Así lo han anunciado este viernes el concejal delegado de Ciudad Habitable y Sostenible, Borja Izaguirre, y el director de Conservación Urbana, Patxi Iriarte, en una rueda de prensa. Izaguirre ha celebrado que, “después de diez años con problemas de goteras en la nueva estación y cuatro años y medio sin hacer cumplir la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Navarra de 2019”, se haya desbloqueado una solución definitiva. El objetivo es acabar con las humedades, filtraciones y goteras que afectan a la infraestructura desde 2015.
El concejal ha asegurado que solucionar este problema ha sido una prioridad del área desde su llegada al Gobierno municipal. “Durante seis años, y especialmente en días de lluvia, la imagen que ofrecía la ciudad a quienes llegaban por la estación era lamentable, con andenes llenos de cubos de plástico”, ha lamentado. Ha recordado también que la infraestructura “costó 38 millones de euros en 2007 y ya en 2014 estaba llena de goteras”.
El Consistorio ha remarcado que, tras varios años de litigios, el Tribunal Superior de Justicia de Navarra dictó en 2018 y 2019 dos sentencias que concluían que la impermeabilización instalada no era idónea y que el Ayuntamiento no debía asumir el coste de la reparación, ya que el fallo se debía a la ejecución de la obra por parte de la concesionaria. Esta había optado por un sistema de láminas impermeables adheridas, no soldadas, que no garantizaba la continuidad material en las uniones.
Canalizar el exceso de agua
La cubierta de la estación es una lámina verde ajardinada integrada en los elementos defensivos de la Vuelta del Castillo, con más de 14.600 m² de pradera y 228 m² de zona pavimentada. El análisis realizado por la UTE Vectalia vincula las filtraciones a problemas de escorrentía desde la cubierta vegetal, así como a deficiencias de impermeabilización en lienzos de la muralla.
El nuevo proyecto rediseña la evacuación de aguas mediante un sistema de tubos de drenaje que recorrerán diagonalmente la parcela, recogiendo el agua infiltrada bajo la superficie hasta el punto de vertido. Se han detectado también encharcamientos por el riego, además de las lluvias.
Impermeabilizar juntas y cierres
Actualmente existen 11.400 metros lineales de juntas sin sellar entre rollos de impermeabilización. Tras analizar otras estructuras similares, el proyecto apuesta por un sistema adherido con láminas de betún modificado SBS, seleccionadas por su equilibrio entre coste, rendimiento y durabilidad.
Antes de colocar este sistema, será necesario desmontar la red de riego, vaciar la tierra y ejecutar un nuevo diseño con protección del arbolado existente. Sobre las nuevas capas de drenaje y aislamiento se colocará un sustrato optimizado con materiales reciclados y nutrientes adecuados para el crecimiento de la pradera.
También se impermeabilizará el muro entre contraescarpa y glacis, para lo cual habrá que desmantelar y reponer la mampostería. El objetivo es garantizar una impermeabilización continua, sin bordes libres, y corregir la ausencia de aislamiento bajo la piedra del muro norte. Se ejecutarán correctamente todos los encuentros perimetrales, las juntas y se sustituirán los materiales dañados.
La estación permanecerá abierta durante toda la obra
El Ayuntamiento ha confirmado que no se prevé ningún cierre total ni parcial de la estación durante la ejecución de las obras. Estas se organizarán de manera escalonada, especialmente en el desmontaje de la cubierta vegetal, para garantizar la continuidad del servicio.
Los trabajos comenzarán tras San Fermín y se prevé que terminen en abril de 2026. En caso de retrasos, el Consistorio podrá imponer sanciones a la empresa responsable. El seguimiento técnico municipal será clave para asegurar el cumplimiento de los plazos.