PAMPLONA

La sorprendente puerta romana y medieval hallada en la Catedral de Pamplona que nadie conocía

La Gerencia y la Comisión de Urbanismo del Ayuntamiento visitan la excavación arqueológica en el espacio de la llamada Torre Barbazana. PABLO LASAOSA

La excavación en la Torre Barbazana revela una puerta medieval sobre restos romanos y será explicada en una sesión abierta en Condestable.

La excavación arqueológica realizada en la trasera de la Catedral de Pamplona ha sacado a la luz restos que podrían situar el origen altomedieval de la puerta de los Canónigos, asentada sobre un estrato tardorromano.

Los trabajos, impulsados por el Ayuntamiento entre el 15 y el 23 de septiembre, han permitido localizar este elemento de la muralla de la antigua Navarrería, cerca de la capilla Barbazana.

El hallazgo fue presentado este jueves al alcalde, Joseba Asiron, y a los miembros de la Gerencia y la Comisión de Urbanismo, en una visita guiada por el responsable de la excavación, Iñaki Sagredo Garde, de la empresa Gestión Cultural Larrate.

El próximo lunes 29 de septiembre, a las 19 horas, el salón de actos de Condestable acogerá una sesión explicativa abierta a la ciudadanía para dar a conocer los detalles del descubrimiento.

La puerta de los Canónigos ha aparecido tapiada y presenta un diseño acorde con las fortificaciones medievales: un dintel en arco escarzano, una anchura de 1,3 metros y jambas que alcanzan casi los tres metros de altura. Tal como marca la autorización del Príncipe de Viana, y por motivos de seguridad y conservación, el espacio excavado volverá a cubrirse con la misma tierra extraída.

Durante la intervención se han localizado también restos de cerámica romana, como piezas de terra sigillata hispánica y cerámica común.

Estos materiales, junto con un estrato ennegrecido que los arqueólogos atribuyen a un incendio del siglo III d.C., apuntan a un origen romano de la estructura. Los indicios señalan que la puerta fue reutilizada en siglos posteriores y pudo ser escenario de episodios clave de la ciudad, como la llegada de Carlomagno en el año 778 o la de Abd al Rahman III en el 924.

Todos los hallazgos se trasladarán al Depósito Arqueológico del Gobierno de Navarra para su registro y custodia. El Consistorio analizará ahora qué uso dar en el futuro a este espacio, mientras se completan los estudios que confirmarán las hipótesis iniciales.

La excavación en la Torre Barbazana es la primera de carácter estrictamente histórico que se lleva a cabo en Pamplona en décadas, desvinculada de obras civiles o reformas.

El resultado se documentará en fichas, planos, fotografías y vídeos, y encaja con las conmemoraciones de este año: el 2.100 aniversario de la fundación de la Pamplona romana y el 602 aniversario de la muerte del rey Carlos III El Noble, impulsor de la carta fundacional de 1423 y del derribo de las murallas que separaban a los burgos medievales.