El mensaje más contundente del Parlamento en el Día Mundial del Sida: "Indetectable es intransmisible"”
La Cámara Foral ha defendido reforzar la prevención y la educación sexual, eliminar el estigma y garantizar una atención socio-sanitaria que tenga en cuenta las necesidades de quienes viven con VIH.
El Parlamento de Navarra ha mostrado este lunes su apoyo al Día Mundial contra el Sida con un acto institucional en el que ha reafirmado su compromiso con la prevención, la educación y la lucha contra la discriminación asociada al VIH. La Cámara ha participado en un encuentro junto a la asociación Sare y la Comisión Ciudadana AntiSida, en una jornada marcada por el lema Comunidad, derechos y vida digna.
Durante la cita, celebrada el 1 de diciembre, el presidente del Legislativo, Unai Hualde, ha defendido la necesidad de visibilizar el VIH y reforzar las campañas de prevención, recordando que “uno de cada tres diagnósticos se da en menores de 35 años”, según los últimos datos del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (ISPLN).
Hualde ha mencionado el acuerdo adoptado por la Mesa del Parlamento el pasado 24 de noviembre, que subraya la importancia de mantener activa la prevención combinada, así como del diagnóstico precoz y el inicio temprano de los tratamientos. Estas herramientas, ha señalado, permiten preservar la salud de las personas que viven con VIH y ayudan a reducir la transmisión.
El Parlamento ha reiterado también su respaldo al Pacto Social por la no discriminación y la igualdad de trato asociada al VIH, comprometiéndose a garantizar una atención socio-sanitaria adaptada a las singularidades de cada paciente, con especial atención a mujeres y personas mayores.
En su intervención, Hualde ha agradecido el trabajo de Sare y de la Comisión Antisida para mejorar los derechos, la atención médica y la concienciación social en torno al VIH, así como su labor para fomentar la prevención de otras enfermedades de transmisión sexual.
Tras el acto institucional, Rebeca Almagro y Raquel Setuáin han dado lectura al manifiesto Comunidad, derechos y vida digna. En él han reclamado el cumplimiento del objetivo internacional 95-95-95, fijado por ONUSIDA para poner fin a la epidemia como amenaza de salud pública. También han exigido eliminar el estigma en centros sanitarios, penitenciarios, educativos, laborales y medios de comunicación.
Las representantes han recordado que el éxito no debe medirse únicamente en la carga viral suprimida, sino también en el bienestar emocional, la calidad de vida y la posibilidad real de desarrollar un proyecto vital pleno.
El manifiesto ha insistido en potenciar la prevención combinada, con acceso a PrEP, PEP, cribados, autotest y campañas basadas en evidencia científica. Además, ha puesto el foco en retos urgentes para las personas que viven con VIH, como el envejecimiento, la fragilidad, las comorbilidades o las barreras en el acceso a vivienda, servicios sociales o empleo.
Uranga y Setuáin han hecho hincapié en la importancia de la educación sexual integral, considerada un derecho fundamental y una herramienta imprescindible de prevención. Han pedido a instituciones y administraciones reforzar recursos, coordinar equipos asistenciales y aprobar políticas que sitúen a las personas en el centro.
El texto ha concluido recordando a todas las personas fallecidas durante la epidemia y a quienes han impulsado el movimiento comunitario. “Por ellas y por todas las personas que viven con VIH, exigimos un futuro en el que convivir con VIH signifique poder vivir plenamente”, han afirmado.
En el cierre del acto, la representante de Sare, Lorea Gurutxarri, ha llamado a consolidar los avances logrados y ha pedido garantizar el acceso universal a recursos y atención sanitaria, independientemente del empadronamiento. También ha solicitado modificar el Real Decreto 1851/2009 para permitir la jubilación anticipada a personas con VIH que presentan envejecimiento prematuro.
Gurutxarri ha subrayado que los avances científicos han convertido el VIH en una condición crónica controlable, recordando la importancia del principio “indetectable es intransmisible”. Sin embargo, ha alertado de que todavía persiste el estigma en el ámbito sanitario. Por ello, ha propuesto reforzar la formación en VIH, mejorar los protocolos de confidencialidad y promover campañas de sensibilización con participación activa de las comunidades afectadas.