El camping de un pueblo de Navarra considerado como uno de los más originales de España
A las puertas de un bosque de robles milenarios, el Camping Etxarri hace las delicias de campistas habituales y ocasionales. Sus cuidadas instalaciones, pero sobre todo sus originales infraestructuras no han pasado desapercibidas para la Federación Española de Campings, que en la última edición de sus premios anuales, le nómino en una de las categorías.
Concretamente, en la categoría de "Camping con los alojamientos más originales". Y es que el hecho de estar prácticamente metido en el bosque, en pleno contacto con la naturaleza favoreció la decisión de construir en su momento unos coquetos bungalows de madera y que han sido recientemente reformados.
Asimismo, también recientemente se estrenaron sus tiendas de glamping, la mezcla perfecta entre 'glamour' y 'camping'. Y es que combinar la experiencia de acampar al aire libre con las comodidades y lujos propios de los mejores hoteles, es una realidad en el camping de Etxarri.
Las tiendas de madera y lona se funden con la arboleda que le rodea en un diseño que le ha valido, junto a sus bungalows clásicos de madera la nominación a los premios.
"Somos un camping familiar y pet friendly ubicado en un paraje natural único como es el Valle de Sakana", defienden desde el camping, para asegurar que su razón de ser es "facilitar unas vacaciones inolvidables rodeadas de bosques de robles milenarios y montañas a nuestro clientes.
El camping cuenta con piscina, bar-restaurante, pista de pádel, parques infantiles o zona de barbacoas y picnic. También ofrecen actividades y animación durante los meses de verano.
En los bungalows, dicen "prima el ambiente tranquilo, la privacidad, la sensación de hogar y descanso". No hay dos bungalows iguales, cada uno tiene su diseño, lo que convierte al camping en original. Todos ellos cuentan con sábanas y toallas incluidas, lo cual es algo a tener muy en cuenta.
Las tiendas de glamping también cuentan con todas las comodidades, suelo de tarima, cama, sábanas, toallas y mantas. Algunas de ellas, las más grandes, con capacidad para cinco personas, tienen baño privado.
Al final, pese a la nominación, no se llevó el premio, pero la amabilidad del personal, la tranquilidad que se respira y el buen ambiente que se vive, bien merece una visita.