Confirmada la huelga de villavesas en San Fermín: servicios mínimos en los días del año más importantes
Pamplona se enfrenta este año a un auténtico drama en plena semana de San Fermín, una de las más importantes del año para la ciudad y en la que más se utiliza el transporte público.
Las villavesas, los autobuses urbanos de la Comarca de Pamplona, no funcionarán con normalidad a partir del 1 de julio debido a una huelga indefinida convocada por los conductores, una decisión que llega tras meses de negociaciones fallidas y que pone en evidencia el gran fracaso de gestión de la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, presidida por David Campión y controlada por grupos independientes afines a EH Bildu, Geroa Bai, Podemos, Contigo y el PSN.
El comité de empresa de TCC, la compañía adjudicataria del servicio, ha confirmado que los trabajadores solo cumplirán con los servicios mínimos, lo que dejará sin una cobertura adecuada a más de 200.000 desplazamientos diarios, precisamente en el periodo donde más se pide a la ciudadanía dejar el coche en casa y recurrir al transporte colectivo para acceder al centro de la ciudad.
La situación es especialmente crítica porque, en condiciones normales, durante San Fermín toda la flota de villavesas trabaja al máximo, con refuerzos incluidos, y aun así no se logra cubrir toda la demanda. La decisión de ir a la huelga en estas fechas ha sido interpretada como un grito de hartazgo por parte de los conductores, que denuncian no solo la falta de mejoras salariales, sino también una ausencia total de avances en derechos laborales.
SERVICIOS MÍNIMOS DE LAS VILLAVESAS EN SAN FERMÍN
La Mancomunidad ha propuesto unos servicios mínimos que, en el mejor de los casos, no serán suficientes para cubrir la enorme demanda prevista durante las fiestas.
Del 1 al 4 de julio, el servicio funcionará al 60 % en horas punta (de 6:30 a 9:30, de 13:00 a 15:30 y de 17:00 a 20:30) y al 40 % en horas valle (de 9:30 a 13:00, de 15:30 a 17:00 y de 20:30 a 22:30). En el servicio nocturno, las líneas con frecuencia igual o superior a 60 minutos no cambiarán, pero las más frecuentes pasarán a operar cada 30 o 60 minutos.
El sábado 5 de julio, el servicio diurno será del 60 % todo el día, y por la noche todas las líneas de alta y media frecuencia funcionarán cada 30 minutos.
Durante los Sanfermines, del 6 al 14 de julio, se aplicará un servicio mínimo del 70 % tanto en horario diurno como nocturno, una cobertura claramente insuficiente para una ciudad que supera los 200.000 viajes diarios en esas fechas.
“El 1 de julio iremos a la huelga indefinida y solo cumpliremos los servicios mínimos”, ha confirmado Juanan Aldudo, portavoz del comité. Según ha explicado, el principal escollo es que la empresa quiere que las subidas salariales se rijan por el índice del funcionariado, algo que no están dispuestos a aceptar porque, aseguran, desde 2012 arrastran una bajada salarial del 5,38 %. “Con ese sistema perderíamos aún más poder adquisitivo”, ha afirmado.
Pero los problemas no se limitan a lo económico. El comité ha denunciado también la negativa de la empresa a mejorar el tratamiento de las bajas médicas, los calendarios laborales, los pluses por trabajar de noche o en festivos y a actualizar el propio texto del convenio, que califican de “absolutamente obsoleto”. A pesar de haber mantenido 16 reuniones desde el pasado 23 de diciembre, no se ha producido ningún avance significativo. Aldudo ha sido muy crítico con la pasividad de la Mancomunidad, a la que responsabiliza directamente de la situación. “Es la responsable final y no está haciendo nada”, ha afirmado. En este sentido, ha recordado que se permitió la entrada de una empresa con un precio de licitación un 14 % inferior a lo estipulado, pese a que se advirtió de que eso acarrearía consecuencias. “Aquí están los resultados”, ha sentenciado.
También ha cargado contra el presidente de la Mancomunidad, David Campión, por apelar ahora a la responsabilidad con el dinero público. “Lo que está pasando ahora es como con los malos estudiantes: lo que no ha hecho durante meses lo quiere arreglar en una semana”, ha afirmado. “Ellos no se lo creen, piensan que es un farol, pero no lo es. Vamos a la huelga”, ha insistido.Mientras tanto, esta misma tarde, representantes de la empresa y del comité están reunidos en un último intento por evitar la huelga, aunque las posiciones siguen muy alejadas y el tiempo se agota. Desde el comité han pedido comprensión a los usuarios, pero insisten en que esta situación ha sido provocada por la falta de voluntad de la empresa y, sobre todo, por el abandono institucional de los responsables políticos de la Mancomunidad. “A esto nos han llevado la empresa y la Mancomunidad”, ha zanjado Aldudo.