Magdalena Perelló, la cardióloga que desmonta el mito del vino: “Una copa al día no protege tu corazón”
La cardióloga Magdalena Perelló ha desmentido la idea de que una copa de vino al día sea buena para el corazón. Ha recalcado que el alcohol es tóxico para la salud cardiovascular, puede provocar arritmias, dilataciones en las cavidades cardiacas y se relaciona con demencias y varios tipos de cáncer.
Según ha explicado, la creencia de que el vino protege al corazón está muy arraigada en los países mediterráneos, donde forma parte de la cultura de la mesa. Sin embargo, ha insistido en que los antioxidantes protectores proceden de los alimentos de la dieta mediterránea y no del alcohol. Por eso, ha defendido que no es necesario beber para cuidar la salud del corazón y que esa copa diaria de tinto no aporta beneficios, sino riesgos.
Perelló admite que un consumo puntual en celebraciones puede entenderse, pero rechaza que se convierta en un hábito. Ha lamentado, además, que las personas que deciden no beber tengan que justificarse socialmente en reuniones familiares o con amigos, como si la abstinencia necesitara una explicación.
En su libro Corazón sano dedica un capítulo a la alimentación cardioprotectora, donde recuerda que lo que ponemos en el plato influye directamente en la salud. Ha citado el estudio PREDIMED, que demostró que la dieta mediterránea reduce hasta en un 30% el riesgo de infarto e ictus, con un efecto comparable al de fármacos tan utilizados como la aspirina o las estatinas.
Entre los pilares de esta dieta ha destacado el papel del aceite de oliva virgen extra, al que define como una grasa de calidad y protectora. También señala el valor del pescado azul, los frutos secos y las legumbres, que aportan nutrientes esenciales para la prevención de enfermedades cardiovasculares.
Por el contrario, advierte sobre los efectos nocivos de los ultraprocesados, las grasas trans y los azúcares añadidos. Ha subrayado la importancia de volver al mercado tradicional y cocinar de manera más saludable, reduciendo las frituras y optando por el horno o la plancha.
La especialista ha recordado que la OMS y las principales sociedades médicas coinciden en que no existe un nivel seguro de consumo de alcohol. El vino, igual que otras bebidas alcohólicas, no debe considerarse un elemento protector, sino un riesgo añadido. “Según nos alimentemos será nuestra salud”, ha concluido.