La nave abandonada de Pamplona que se convertirá en un flamante centro de investigación
La antigua nave industrial de la calle Tajonar de Pamplona, colindante con las istalaciones de la Universidad Pública de Navarra, dará un giro radical para convertirse en la sede del Centro de Industrialización y Robótica Aplicada a la Construcción y la Arquitectura (BAI). El proyecto supone una inversión de más de 6,4 millones de euros y arrancará sus obras este mes de agosto.
La empresa pública NASUVINSA ha adjudicado la rehabilitación y adecuación de este espacio a la unión temporal de empresas formada por Construcciones Adolfo Sobrino y Erki Construcción Sostenible. La actuación transformará completamente los 3.246,90 m² de superficie útil en un enclave puntero para la innovación tecnológica, la robótica y la impresión 3D aplicadas a la construcción.
Durante la reciente visita a las instalaciones, representantes de la ETH de Zúrich —centro colaborador del BAI— confirmaron que el futuro instituto contará con su reconocimiento académico para el primer título propio. Este programa incluirá dos especializaciones: una orientada a los fundamentos del diseño e innovación en construcción, y otra al diseño avanzado y la industrialización.
El BAI, diseñado por los arquitectos Francisco Mangado y Andrea Deplazes, dispondrá de laboratorios, talleres, áreas de investigación y espacios docentes. Su vocación es situar a Navarra como referente internacional en industrialización y robótica para la arquitectura, con la colaboración de universidades como la UPNA y la Universidad de Navarra.
El proyecto cuenta con financiación de la Unión Europea a través de los Fondos Next Generation EU, dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, además de apoyo del Ministerio de Industria y Turismo.
Para el consejero de Universidad, Innovación y Transformación Digital, Juan Luis García, “el BAI es una apuesta estratégica para situar a Navarra a la vanguardia de la construcción y rehabilitación industrializada y sostenible, generando conocimiento, empleo de calidad y reforzando la colaboración con referentes propios e internacionales”.
En la misma línea, el director gerente de NASUVINSA, Javier Burón, ha subrayado que esta adjudicación permitirá “transformar estas naves en la sede de un centro pionero que será motor de innovación, transferencia tecnológica y desarrollo económico para Navarra”.
Por su parte, el arquitecto y director académico del BAI, Patxi Mangado, ha explicado que el diseño busca “crear un ecosistema donde docencia, investigación e innovación industrial convivan, con espacios flexibles capaces de acoger desde prototipos y robótica hasta formación universitaria y colaboraciones con la industria”.
El BAI prevé estar completamente operativo en 2026, consolidándose como un nodo estratégico para la investigación, la docencia y el desarrollo industrial en la Comunidad Foral.