El nuevo plan de moda en Navarra: un picnic entre olivos que conquista a los visitantes
El turismo gastronómico ha sumado un nuevo atractivo en Navarra. Cada vez más visitantes han descubierto un plan diferente y sensorial: el picnic entre olivos en la finca de Artajo, ubicada en Fontellas, en el corazón de la Ribera de Navarra, junto a la autovía A-68. Una experiencia que mezcla naturaleza, gastronomía y cultura, convirtiéndose en uno de los planes más buscados del fin de semana.
La propuesta se centra en disfrutar de un almuerzo al aire libre, rodeado de olivos centenarios, con productos de calidad y un ambiente único. Los visitantes reciben una cesta completa de picnic, con pan recién horneado, dos botellas de aceite virgen extra de la gama Artajo y la vajilla necesaria para disfrutar de la experiencia en una de las mesas reservadas junto al trujal.
Pero este plan va mucho más allá de comer en plena naturaleza. Artajo ha diseñado toda una oferta de actividades en torno al mundo del olivo y del aceite. Desde visitas guiadas por el olivar y la bodega, hasta degustaciones de sus aceites más reconocidos, los participantes tienen la oportunidad de adentrarse en el proceso de elaboración del auténtico “zumo de aceituna”.
Los sábados, la visita guiada con cata se ha convertido en una de las propuestas más demandadas. Incluye un recorrido por la finca, el molino y la bodega, además de la proyección de un audiovisual sobre el proceso de producción. El plan termina en la sala de catas, donde se prueban las seis variedades de Artajo acompañadas de pan y almendras tostadas. Cada visitante se lleva además dos botellas de 100 ml, un recuerdo que prolonga la experiencia en casa.
La carta del picnic refuerza la apuesta por el producto local. Entre las opciones se encuentran conservas de la huerta navarra como alcachofas, espárragos o pimientos del cristal, además de embutidos, quesos Idiazabal, anchoas o mejillones. El toque dulce lo ponen las tejas de almendra o los macarons de Rafa Gorrotxategi, junto al café que también se puede incluir en la cesta.
El entorno natural ha sido otro de los grandes reclamos. La finca cuenta con eco-rutas autoguiadas que permiten pasear entre olivos, aprender sobre la gestión del agua o descubrir las diferentes variedades de aceitunas cultivadas. Con paneles informativos y audios en varios idiomas, estos itinerarios se han consolidado como un complemento ideal para quienes quieren alargar la experiencia.
Además, Artajo ha pensado también en quienes viajan en autocaravana o camper. A menos de 500 metros de la autovía, el área de estacionamiento permite pernoctar rodeado de olivos, con servicios básicos y seguridad. Una manera diferente de vivir el turismo slow en Navarra, uniendo descanso, naturaleza y buena mesa.
Este concepto de picnic entre olivos refleja la tendencia creciente del enoturismo y el oleoturismo en la comunidad foral, donde cada vez más visitantes buscan planes que combinen gastronomía, sostenibilidad y experiencias auténticas. Y en este caso, todo sucede a la sombra de los olivos.