Un cardenal condenado agita el ambiente en el Vaticano antes del cónclave por el sucesor de Francisco
La presencia del cardenal Angelo Becciu en las reuniones previas al cónclave ha generado una fuerte polémica en el Vaticano, justo en la semana en la que los cardenales se preparan para elegir al nuevo Papa tras el fallecimiento de Francisco el pasado 23 de abril, a los 88 años.
Becciu, condenado en diciembre de 2023 a cinco años y seis meses de prisión por un tribunal vaticano por su implicación en un escándalo de fraude financiero, ha insistido en asistir a las reuniones pese a haber sido apartado de sus privilegios cardenalicios por el propio Francisco en 2020.
Según figura en un registro oficial del Vaticano, Becciu no tendría derecho a voto en el cónclave. Sin embargo, en una reciente entrevista con el diario L’Unione Sarda, el cardenal ha afirmado que esa lista "no tiene valor legal", lo que ha intensificado las críticas en torno a su presencia.
La controversia se suma al delicado contexto que vive la Iglesia tras la muerte del Pontífice. Aunque en 2022 el Papa permitió que Becciu asistiera a una asamblea de cardenales, el Vaticano nunca ha confirmado oficialmente su rehabilitación, lo que deja su estatus actual en una zona gris.
A pesar de la polémica, 113 cardenales han asistido este jueves a la tercera Congregación General celebrada en el Aula del Sínodo del Vaticano. El encuentro ha comenzado a las 9.00 horas con una oración y ha finalizado a las 12.00, incluyendo un receso de media hora. Durante la sesión, han prestado juramento los cardenales que aún no lo habían hecho, en cumplimiento de la constitución apostólica Universi Dominici Gregis.
Se han producido 34 intervenciones sobre los desafíos de la Iglesia y su papel en el mundo. Además, se ha acordado que el cardenal Víctor Manuel Fernández celebre la misa del sexto día de los Novemdiales, en lugar del camarlengo, el cardenal Kevin Farrell. También se ha confirmado que el padre Donato Ogliari pronunciará la primera meditación del cónclave, mientras que el cardenal Raniero Cantalamessa hará la segunda, en el inicio del mismo. La fecha del cónclave aún no ha sido anunciada.
Durante la sesión, los cardenales han leído los primeros 23 párrafos de la mencionada constitución apostólica, y han comenzado el diálogo abierto sobre el presente y futuro de la Iglesia.
El mundo despide a Francisco
Según ha informado el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, más de 61.000 personas han presentado sus respetos al Papa hasta las 13.00 horas del jueves. La Basílica de San Pedro permanecerá abierta hasta la medianoche, salvo que continúen las colas para acceder.
Este sábado, durante la misa funeral, un grupo de personas pobres y necesitadas se ubicará en la escalinata de la Basílica de Santa María la Mayor para dar el último adiós al Papa Francisco, en un gesto que recuerda su compromiso con los más vulnerables y su elección del nombre pontificio.
Por la noche, a las 21.00 horas, se rezará un rosario público frente a la misma basílica, mientras que el funeral del Pontífice será en privado. A partir del domingo 27 de abril, los fieles podrán visitar la tumba del Papa Francisco en la Basílica Mariana.