El partido de Osasuna de Copa del Rey en Chiclana podría no jugarse por una grave situación
El partido de Copa del Rey que el Club Atlético Osasuna tiene que disputar esta tarde de miércoles en Chiclana contra el equipo de la localidad andaluza corre un grave riesgo de suspensión.
La culpable es la DANA que está atravesando la península ibérica y que entró precisamente por el Golfo de Cádiz, dejando a su paso fuertes tormentas que en la zona del Levante llegaron a alcanzar los 400 litros por metro cuadrado.
Antes de llegar allí, varias tormentas descargaron sobre Chiclana, provocando la inundación de todos los anexos del terreno de juego donde se habían colocado gradas supletorias para que el equipo gaditano recibiera a un primera división como Osasuna.
Los bomberos municipales, con la colaboración de los empleados de las instalaciones deportivas se esmeran en retirar el agua con motobombas y cruzan los dedos para que las lluvias no afecten al encuentro que llevan esperando en la localidad desde el mismo día del sorteo en la Federación, hace semanas.
Aún así, las predicciones no son muy halagüeñas. Según la Agencia Estatal de Meteorología a la hora del partido pesará sobre toda la provincia de Cádiz una alerta naranja por abundantes precipitaciones, que podrían alcanzar los 80 litros por metro cuadrado.
Esas cantidades, sobre todo lo que ya ha llovido en la zona, podrían llevar a plantear la conveniencia o no de la disputa del partido, más allá de la inundación en la zona de gradería, por cómo pudiera quedar el césped del campo municipal de deportes de Chiclana.
De todas formas, no será hasta minutos antes del encuentro, cuando el colegiado del encuentro se reúna con los delegados de los dos clubes y con los capitanes para tomar una decisión.
No obstante, y a pesar de que las instalaciones están anegadas, lo cierto es que el drenaje del campo ha funcionado bien, se encuentra en condiciones practicables.