Una placa recuerda a un pamplonés asesinado hace 20 años en el punto en el que fue tiroteado
Ángel Berrueta ya tiene una placa en Pamplona que le recuerda. El Ayuntamiento de Pamplona ha colocado una placa cerca de la panadería que regentó, en la calle Martín Azpilcueta hasta que fue asesinado el 13 de marzo de 2004.
Al acto han asistido miembros de la corporación municipal de Pamplona, así como también familiares de Berrueta, incluyendo a su viuda, Mari Carmen Mañas, y tres de sus cuatro hijos: Imanol, Aitor y Aitziber. Su hijo Enekoitz no pudo asistir, ya que se encuentra trabajando fuera de Pamplona. Estos familiares son considerados víctimas de motivación política.
El texto de la placa, supervisado por el departamento de Memoria y Convivencia del Gobierno de Navarra, dice en euskera y castellano: "Aquí fue asesinado por un funcionario de policía Ángel Berrueta Legaz, en un contexto de motivación política el día 13 de marzo de 2004. Verdad, memoria, dignidad y justicia".
La placa se ha colocado cerca de la panadería que Ángel Berrueta regentó, en la calle Martín Azpilcueta, junto al portal 18. Allí fue asesinado el 13 de marzo de 2004 por un policía nacional fuera de servicio, quien llegó a la panadería acompañado de su hijo. Este asesinato ocurrió dos días después del atentado del 11-M, que causó 193 muertes y dejó más de 2.000 heridos. En 2005, el juzgado condenó al policía nacional y a su hijo a 20 y 15 años de cárcel, respectivamente. En la sentencia, se relacionó el crimen con el clima de crispación que siguió a los atentados del 11-M.
Aitziber Berrueta Mañas, hija de Ángel Berrueta, se encargó de expresar su agradecimiento por el homenaje. El evento también contó con la presencia de integrantes de la plataforma Ángel Gogoan, formada por vecinos, amigos y familiares de Berrueta, que buscan su reconocimiento como víctima de motivación política. El alcalde de Pamplona también dirigió unas palabras a la familia de Berrueta, señalando: "Queremos recordar no solo por nosotros, sino también por quienes, como Ángel, ya no pueden hablar ni contar su historia. Recordamos por todas las víctimas y por quienes, en el futuro, también lo harán. Para que la historia no se repita. Gracias por vuestra fortaleza, por vuestra lucha y por mantener viva la memoria de Ángel durante todo este tiempo".