Bildu se niega a investigar los ataques vandálicos contra apartamentos turísticos en Pamplona
El grupo municipal de EH Bildu en el Ayuntamiento de Pamplona, con el alcalde, Joseba Asirón, a la cabeza, se ha negado a apoyar la denuncia de la Asociación de Apartamentos Turísticos de Navarra, que ha solicitado una investigación exhaustiva para identificar y sancionar a los responsables de los actos vandálicos de sabotaje contra los mismos.
Ha sido en la comisión de Presidencia del Consistorio en la votación de una declaración presentada por el Partido Popular en la que se pedía la condena del sabotaje que buscaba impedir el acceso de los clientes a los pisos turísticos.
El grupo municipal de UPN ha presentado una enmienda de adición en la que pedía el apoyo para la Asociación y una investigación exhaustiva para localizar a los responsables del ataque. En este punto, Bildu, que es quien ostenta la concejalía de seguridad ciudadana, de la que depende la Policía Municipal de Pamplona y el control de las cámaras de seguridad instaladas por toda la ciudad, se ha abstenido.
Sí es cierto que el punto de condena del ataque se ha aprobado por unanimidad, pero en el tercer punto de la declaración, de nuevo el grupo municipal del alcalde se ha desmarcado, votando esta vez en contra de "apoyar al sector de apartamentos turísticos de nuestra ciudad que opera cumpliendo todas las normas".
Llama la atención que en el punto en el que se habla de investigar e identificar a los culpables del sabotaje, los socios de Bildu en el consistorio: los socialistas de Marian Curiel, se han abstenido.
A esta declaración se ha sumado una segunda que pretendía condenar los ataques vandálicos realizados en comercios del Casco Antiguo de Pamplona. La declaración muestra la solidaridad con los propietarios de dichos comercios, al tiempo que rechaza los comportamientos vandálicos sufridos por dichos establecimientos.
Asimismo, la declaración condena las acusaciones de “cómplices de genocidio” que sin ningún fundamento se vertían en las pintadas sobre "personas honradas dueñas de pequeños comercios"; y subraya "el convencimiento de que este tipo de actos no solo dañan al comercio de nuestra ciudad, sino que además son perjudiciales para la causa que dicen defender".
Todos los grupos han apoyado la declaración. Todos menos el del alcalde, Bildu, que se ha abstenido.