La defensa de Cerdán busca ganar tiempo en el Supremo y pide aplazar las citas de Ábalos y Koldo
La defensa de Santos Cerdán ha solicitado al Tribunal Supremo suspender las declaraciones de José Luis Ábalos y Koldo García, previstas para los días 15 y 16 de octubre, en el marco del conocido como caso Koldo.
Los letrados aseguran que en esas fechas tienen señalamientos judiciales coincidentes en otras sedes y no podrían comparecer.
En el escrito remitido al magistrado instructor, los abogados explican que ya tenían fijados juicios orales con causa de preso, así como la continuación de un juicio en la Audiencia Nacional, antes de conocerse la citación. Precisaron además que los procedimientos se celebrarán en Arenys de Mar, Barcelona y Girona, por lo que piden modificar el calendario.
El magistrado Leopoldo Puente, encargado del caso, decidió citar de nuevo a Ábalos y Koldo García tras recibir un informe de la UCO de la Guardia Civil sobre la situación patrimonial del exministro de Transportes y su posible vinculación económica con su antiguo asesor, que señala la existencia de “ingresos irregulares y opacos”.
Según el juez, existen indicios consistentes de que entre los patrimonios de ambos “podrían existir significativas zonas de intersección”, ya que Koldo habría asumido pagos personales del exministro, como la pensión alimenticia de su hijo, nóminas domésticas, viajes o regalos, entre otros. Estos gastos, detalló, alcanzarían importes muy relevantes sin que se haya identificado una contrapartida económica por parte de Ábalos.
Puente plantea dos posibilidades: o bien Koldo realizó los pagos sin recibir nada a cambio, o bien el exministro le devolvió el dinero en metálico o por otros medios no registrados. A su juicio, Ábalos podría haberse beneficiado de fuentes irregulares de ingresos, lo que encajaría con los movimientos de dinero en efectivo no justificados detectados por la Guardia Civil.
El magistrado también llamó la atención sobre el hecho de que Ábalos no retiró efectivo de sus cuentas entre 2018 y 2023, algo que volvió a hacer en 2024, lo que consideró una circunstancia “sugestiva”. Las conclusiones de la UCO apuntan a que tanto el exministro como su asesor “pudieron mantener métodos no transparentes de comunicación patrimonial”, con dinero procedente de posibles ilícitos penales.
La Guardia Civil cifró en 95.437 euros los pagos realizados sin rastro bancario por Ábalos, de los cuales más de 20.000 euros corresponden a gastos personales sin justificar. El informe también indica que el PSOE pagó parte de esos gastos en sobres de efectivo, algunos documentados y otros sin respaldo.
Finalmente, la UCO señala que en conversaciones intervenidas, Koldo y su entonces esposa, Patricia Uriz, reconocieron que parte del dinero que manejaban no era suyo, sino de Ábalos, y lo identificaban con clave como “chistorras” (billetes de 500 euros), “soles” (200) y “lechugas” (100).