El joven de Fitero que no puede vivir sin el encierro de San Fermín: "Ha merecido mucho la pena"
Uno de los motivos por los que en San Fermín se congrega tanta gente son los toros. Estas bestias son las protagonistas del encierro y las corridas en la plaza, y a algunos les encanta verlas luchar contra los hábiles toreros o correr junto al resto de corredores del encierro.
Mikel Alfonso, un joven de Fitero con síndrome de Down, es uno de esos amantes del mundo taurino. Su madre Imma es también aficionada, pero su hijo le ha acabado superando. "Mikel no se pierde ni un solo encierro de San Fermín. Se pone en la televisión y lo vemos en casa tranquilos", cuenta la madre.
Pero este año ha habido una excepción, y es que Mikel y su madre no han visto el encierro del 13 de julio en su casa. "Una de las asociaciones de toros de Navarra repartió pases para el encierro a diferentes empresas. Y dio la casualidad de que en donde trabaja Mikel llegaron unos cuantos. Como él tenía prioridad, le regalaron dos pases para verlo en Casa Seminario", explica Imma.
"Vivimos en Fitero y nos hemos despertado a las 4 de la mañana para llegar a Pamplona. Yo me he pegado un madrugón, pero Mikel tenía tantas ganas de ir que no ha dormido nada", continúa la madre. "Ha merecido mucho la pena. Y no estoy nada cansado", añade el hijo.
Al llegar a Pamplona han sido muy bien recibidos y han podido saludar a muchos conocidos. "Mikel conoce a muchos corredores del encierro y tiene muchos amigos que les gustan los toros a través de las redes sociales. Han venido a verle y a abrazarle, y eso lo apreciamos muchísimo", afirma Imma.
La madre de Mikel se queda sorprendida con lo mucho que le gustan los toros a su hijo. "A mí de pequeña me gustaban y todavía me gustan, pero Mikel lo vive de otra manera. Yo no le transmití mi afición, su amor por el mundo taurino salió de él mismo. Le gustan tanto que tiene hasta camisetas de recortadores y toreros famosos", dice ella.
Desgraciadamente, no pueden ir a todos los festejos relacionados con los toros como a Mikel le gustaría. "Este encierro del 13 de julio ha sido una oportunidad de oro para nosotros porque nunca habíamos ido al encierro antes. Pero por su amistad con recortadores y ganaderos, a Mikel le invitan mucho a fiestas con toros. La cosa es que muchas veces no podemos ir y las tenemos que rechazar", comenta la madre.
Sin embargo, Mikel todavía se aferra a la esperanza de volver a ver en Pamplona un encierro de San Fermín. Imma se ríe: "No sé si tendremos esta oportunidad de nuevo, pero nunca se sabe". "Yo quiero verlo otra vez porque me ha encantado. Viendo y aprendiendo sobre toros me ayudará a cumplir mi sueño de ser torero", finaliza Mikel.