Un avance de la Clínica Universidad de Navarra permite detectar antes una cruel enfermedad
Un estudio realizado por la Clínica Universidad de Navarra ha demostrado que combinar dos pruebas de imagen cerebral permite predecir mejor qué pacientes con deterioro cognitivo leve desarrollarán alzhéimer en poco tiempo.
Los resultados se han publicado en la revista European Journal of Nuclear Medicine and Molecular Imaging y se basan en el seguimiento de 145 personas entre los años 2013 y 2021.
Las dos pruebas utilizadas son el PET de amiloide y el PET de FDG. El primero detecta la presencia de una proteína vinculada al alzhéimer que puede aparecer hasta 20 años antes de que empiecen los síntomas. El segundo mide el consumo de glucosa en el cerebro, una señal clave para detectar si hay zonas que están empezando a fallar.
Según el doctor Javier Arbizu, director de Medicina Nuclear de la Clínica, “estas herramientas son valiosas y complementarias. Nos permiten hacer un diagnóstico temprano sin necesidad de técnicas invasivas, y así observar cómo está funcionando el cerebro del paciente”.
El análisis permitió dividir a los pacientes en cuatro grupos, según sus resultados. La neuróloga Beatriz Echeveste ha explicado que “cuando el PET de amiloide da positivo, hay muchas probabilidades de desarrollar alzhéimer. Si, además, el PET de FDG también da positivo, la enfermedad avanzará antes. En cambio, si ambas pruebas son negativas, la evolución suele ser más lenta o estable”.
En España se detectan 40.000 nuevos casos de alzhéimer cada año. Aunque todavía no existe una cura, sí hay tratamientos que ayudan a frenar los síntomas. Entre ellos destacan los fármacos antiamiloides, que intentan reducir la acumulación de esta proteína en el cerebro.
“Conocer cuanto antes la situación del paciente nos permite decidir las mejores estrategias para frenar la enfermedad”, ha destacado la doctora Echeveste.