El sendero de Navarra que esconde un agujero misterioso y lleva hasta una basílica medieval
La ruta hasta la basílica de Santiago de Lóquiz es uno de los recorridos más atractivos de Tierra Estella, tanto por su entorno natural como por la riqueza patrimonial que guarda al final del camino. El itinerario parte en el pueblo de Ollobarren, junto a su iglesia, y desde el inicio sorprende por la belleza de la Sierra de Lóquiz.
El sendero, señalizado con marcas blancas y amarillas, discurre por una pista ancha que atraviesa un depósito y conduce hasta un cruce. Siguiendo de frente hacia la sierra, se pasa por una fuente y un pequeño merendero, donde comienza la subida bajo las paredes rocosas. Uno de los puntos más singulares es el Agujero de Ollobarren, una cueva-pasadizo de unos 30 metros que, a pesar de su oscuridad y de la curva que describe, no necesita linterna.
Superado este tramo, el terreno se vuelve rocoso y puede resultar resbaladizo en días húmedos, por lo que es aconsejable usar calzado de trekking. Tras el ascenso, el sendero se estrecha entre la vegetación hasta abrirse en un claro donde se levanta la ermita-basílica de Santiago de Lóquiz, un templo gótico del siglo XIII que, con el paso de los siglos, ha recibido varias ampliaciones.
El edificio, construido en sillarejo, presenta una nave rectangular cubierta con crucería cuatripartita, salvo el tramo final, que se resuelve con cañón apuntado. En su interior destaca un retablo neoclásico con la imagen en mármol de Santiago, realizada en 1946. Junto a la iglesia se conserva la casa del ermitaño y un pequeño recinto cubierto con fogón y bancos, reflejo de su función como lugar de encuentro.
La historia del templo también añade interés a la visita. Originalmente estuvo dedicado a San Cucufato, pero en 1630 adoptó la advocación actual de Santiago. Durante siglos fue sede de la Junta de Santiago de Lóquiz, institución que regulaba el gobierno de la sierra en representación de los 25 pueblos del facero.
El descenso se realiza por el puerto de Ganuza, con vistas panorámicas espectaculares, pasando por el pueblo y la ermita de Santa Eulalia, para regresar finalmente a Ollobarren. Todo el recorrido se encuentra bien señalizado con panel informativo al inicio.
Esta ruta tiene una dificultad moderada, ya que como se ha comentado, presenta tramos algo resbaladizos y otros con bastante piedra suelta. Aún así, su trazado es bastate asequible. El recorrido es de 6,88 kilómetros, con un desnivel de 368 metros. Se puede realizar en alrededor de 3 horas.
La Sierra de Lóquiz cuenta, además, con una red de senderos perfectamente trazados, entre los que se encuentra esta ruta. Este recorrido es una oportunidad única para disfrutar de la naturaleza, la historia y el patrimonio de Navarra en una misma excursión.