SOCIEDAD

La empresa de Navarra que no ha pagado las nóminas de septiembre a sus 400 trabajadores

Trabajadores de Sunsundegui se han concentrado este martes para exigir el pago de las nóminas del mes de septiembre. UGT
Los trabajadores han hecho un llamado urgente a todos los actores implicados para encontrar una solución rápida.

La situación se agrava en la Sakana. Sunsundegui, la empresa de fabricación de autobuses, se encuentra en una complicada situación de preconcurso de acreedores y, para empeorar las cosas, no ha abonado la nómina correspondiente al mes de septiembre a sus 400 trabajadores. Esta falta de pago ha generado gran preocupación y malestar entre la plantilla, que espera con ansiedad la resolución de este problema.

A esta delicada situación se suma el anuncio realizado este martes por la empresa Azkenga SL, una fábrica de estructuras metálicas situada en Echarri Aranaz y uno de los proveedores clave de Sunsundegui. Azkenga ha comunicado a sus 38 trabajadores que se verán obligados a rescindir sus contratos como parte de los preparativos para la presentación de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE). Esta decisión no solo afecta a los empleados de Azkenga, sino que también impacta negativamente en la cadena de suministro de Sunsundegui, profundizando aún más la crisis económica que enfrentan ambas empresas.

Desde la mayoría del comité de empresa de Sunsundegui, compuesto por los sindicatos UGT, LAB y ELA, han denunciado que "no ha sido abonada la nómina correspondiente al mes de septiembre". Esta situación indica que la empresa está entrando en "una situación económica complicada que se ve agravada por la entrada inminente en un ERTE".

Ante este escenario crítico, los representantes de los trabajadores han hecho un llamado urgente a todos los actores implicados en la situación de Sunsundegui. Han instado al consejo de administración, al Gobierno de Navarra y a Sodena a trabajar en conjunto para encontrar una solución rápida y desarrollar un plan de viabilidad que garantice el futuro de Sunsundegui, así como el de su plantilla y de la comarca en general. La presión social y laboral aumenta, y se espera que se tomen medidas efectivas antes de que la situación se deteriore aún más.