Comercio Local

El histórico zapatero de Pamplona que se jubila y evita el cierre de su negocio a última hora

Fermín Javier Roa Córdoba es el zapatero de la calle San Antón 4 en Pamplona. Navarra.com
Fermín Javier Roa lleva trabajando en el calzado desde los 22 años y fue el pionero en arreglar zapatos al momento en la ciudad.

La tienda Calzaperfect de Pamplona y sus clientes más habituales ha vivido semanas de angustia por la próxima jubilación de su dueño, Fermín Javier Roa, uno de los zapateros más conocidos de la capital navarra.

Calzaperfect está situada en la calle de San Antón 4, en pleno casco viejo de la ciudad. Muy cerca de otros establecimientos que hemos conocido en este apartado de comercio local.

Como es el caso, por ejemplo, de la confitería y cerería Donezar que lleva casi 160 años abierta con Joaquín Donezar en la sexta generación, o la tienda de ropa Almacenes Numancia que abrió sus puertas en 1949 y sigue adelante con Inmaculada Martínez y su sobrino Carlos Ollo.

Fermín Javier Roa Córdoba nació en Chile pero a los tres años su familia regresó a Pamplona. Dejó pronto los estudios y a los quince años ya estaba en la zapatería Jauja de la familia Ayestarán.

A los 22 años abrió en Pamplona 'Don Rápido' en la avenida de Carlos III con su hermana Pili y su cuñado Javier Ayesa. Fue el primer negocio de arreglo de zapatos al momento. Fermín se traslada en el año 2003 a su tienda actual donde va a cumplir más de veinte años.

"Como zapatero llevo ya 40 años ya pasadicos. Ahora ya me jubilo con ganas. Llevo 47 años y medio y creo que está bien porque voy a cumplir muy pronto los 63 años", señala.

Fermín Javier reconoce que no es fácil dejar este trabajo de toda la vida: "Claro que me da pena porque es un oficio muy bonito como es coger cosas deterioradas, arreglarlas, y sorprender al cliente. Está muy bien".

El recuerdo que se lleva es muy positivo: "Me quedo muy contento de lo que he hecho, de haber trabajado en esto. Me gustan las manualidades, así que adelante". Los clientes ya conocen la noticia de su jubilación: "Están pasando a darme la enhorabuena. La verdad que estoy muy contento".

Lo mejor del negocio es que da para vivir: "Yo llevo toda la vida con las máquinas que tengo, que no sufren. Mi hijo me repasa los rodamientos y correas de arriba a abajo". Sus hijos no le siguen en la tienda: "Han estudiado más que yo. El hijo es mecatrónico y la hija profesora".

Cuando el cierre de Calzaperfect parecía seguro, una llamada a última hora ha salvado la dolorosa situación: "Tenemos un relevo. Es un muchacho joven (Fernando) que se ha formado en la tienda Mister Minit de reparación de calzado en La Morea, donde estos jóvenes trabajan las llaves, grabados y el calzado. Son gente muy bien formada".

"Esta gente es competitiva cien por cien. Es una empresa de ámbito nacional que los forman muy bien. El chaval rondará los treinta años de edad y empezará a trabajar en noviembre. Esto no tiene mucha complicación, pero hay que adaptarse a las máquinas. Es como cuando te compras un coche. Sabes conducir pero hay que adaptarse al coche. Esto es igual", concluye Fermín Javier.

Fachada de la tienda Calzaperfect en la calle San Antón 4 de Pamplona. Navarra.com