Comercio Local

La mítica tienda de chuches de Pamplona que sorprende con novedades para Navidad

Joaquín Solano en su tienda Sagutxo golosinas en el barrio de Ripagaina. Navarra.com
“Somos una tienda de chucherías que vende producto local”, y desde ahora se pueden reservar los roscos de Reyes del panadero de Eugi.

En plena avenida de Ripagaina, el olor a pan artesano ha empezado a convivir con el color de las chucherías. El barrio ha sumado unas novedades inesperadas dentro de una tienda que muchos solo conocían por sus dulces y cromos. Uno de ellos son los espectaculares roscos de Reyes del panadero de Eugi, que ya se pueden reservar.

Detrás de ese cambio está Sagutxo Golosinas. Su propietario, Joaquín Solano Hermoso de Mendoza, pamplonés de 51 años con raíces en Tierra Estella ha convertido su negocio en uno de los puntos de venta del pan artesano del reconocido panadero de Eugi.

El giro no ha sido casual. Joaquín recuerda que ha encontrado la solución perfecta: “Hemos buscado una alternativa con el panadero de Eugi, que es una eminencia en Navarra. Por suerte estoy vendiendo mucha más cantidad de pan que antes”. Lo dice con la emoción de quien ha descubierto en este pan artesano un filón inesperado dentro de una tienda de chuches.

La apuesta no se queda en el pan. Joaquín insiste en que Sagutxo no es ya solo una tienda donde se compran bolsas de gominolas “puras y duras”. “Somos una tienda de chucherías que vende producto local”, y lo hace además con gran orgullo para destacar las ventajas del producto local.

Lo demuestra con una oferta que crece: pastas de canela, lazos de chocolate de Azagra, pastas de té de Huarte, bizcocho casero de la baztanesa de Elizondo, pastas y magdalenas Erburu de Espinal... y, ahora, el pan que cada día entra y sale de su mostrador directo a las bolsas de los vecinos. “Quiero dar a conocer que Sagutxo es mucho más que una tienda de chuches”, comenta orgulloso.

Lo sorprendente es que este negocio de barrio corre a cargo de alguien que ha probado casi de todo. Joaquín salió de la EGB, estudió electricidad en talleres profesionales del Ayuntamiento, trabajó en hostelería, vendió libros puerta a puerta, pasó por fábricas y estuvo 14 años en Mapfre. “Aquí llevo cuatro años y es donde espero jubilarme”, confiesa. Quizá por esa experiencia sabe que en un barrio joven como Ripagaina, donde “está todo muy parado”, hay que reinventarse para que te conozcan.

Su receta para mantenerse en movimiento no tiene que ver con el horno, sino con el móvil y un trípode. Joaquín graba vídeos, los sube a redes sociales y, en sus días libres, recorre pueblos con el objetivo de localizar nuevos productos que puedan encajar en la tienda. “No puedes estar sentado en la silla. Hay que tirar para adelante como sea”, afirma. Así ha encontrado gran parte de los artículos que hoy comparte con los vecinos.

El vínculo con los clientes es parte del encanto del comercio. “A los clientes ya los tengo como si fueran de la familia”, dice, entre risas, mientras cuenta que algunos niños se paran en la puerta y obligan al padre a entrar “solo para saludarle”. Agradece el cariño y, aunque lamenta que en el barrio falten servicios debido a depender de cuatro ayuntamientos, asegura estar “fidelizado” a la zona y querer quedarse muchos años más.

Su pasión por el producto navarro viene de lejos. Fue el creador de la página de Facebook ‘De Nuestra Tierra Navarra’, desde la que quería mostrar “todas las marcas que son de aquí y pueden adquirir en los supermercados”. Esa idea, que empezó en redes, ha terminado plasmándose en un mostrador repleto de producto local… ahora también con pan.

Las reseñas de quienes pasan por la tienda reflejan la sorpresa de descubrir que Sagutxo es más que chuches. Una clienta describe el local como “pequeño pero muy colorido y atractivo, ideal para pasar y picar algo o buscar cosas específicas”, y celebra que encontró “justo lo que buscaba” cuando fue a por cromos de LaLiga 25-26.

Otro comentario destaca que la tienda ya ofrece “productos de alimentación, artesanos y delicatessen. Pan, txantxigorri, dulces, y mucho más. Ya hemos probado varios. Buenísimo”.