La joya medieval de Navarra que ofrece una de las mejores vistas del valle del Ebro
El Castillo de San Esteban de Deyo, también conocido como Castillo de Monjardín, se alza sobre un cerro a 894 metros de altitud, dominando la localidad de Villamayor de Monjardín, en Navarra.
Su ubicación estratégica ofrece una panorámica excepcional de los valles circundantes, desde la sierra de Urbasa hasta el río Ebro, con una vista que abarca hasta las Bardenas Reales.
El Castillo de Deyo tiene sus orígenes en la época romana, aunque su papel clave en la historia de Navarra se consolidó en los siglos posteriores. Fortificado por los musulmanes, fue uno de los bastiones más importantes de los Banu Qasi, la influyente familia muladí que dominó gran parte del valle del Ebro en el siglo IX. Su relevancia fue tal que aparece citado tempranamente en las crónicas árabes.
En el año 907, el castillo fue escenario de una batalla crucial, cuando el rey Sancho Garcés I de Pamplona lo conquistó, marcando el inicio de la expansión cristiana en la región. Desde entonces, se convirtió en una de las fortalezas más importantes de la Corona de Navarra, sirviendo como residencia real y, según la tradición, como panteón donde el propio Sancho Garcés y sus hijos fueron enterrados.
A lo largo de los siglos, la fortaleza sufrió varias transformaciones. Fue reparado en 1366 y tuvo un papel defensivo clave en la conquista de Navarra en 1512. A pesar de las demoliciones ordenadas por la monarquía castellana, logró conservar parte de sus estructuras. Su importancia estratégica perduró hasta las guerras carlistas del siglo XIX, cuando volvió a ser escenario de enfrentamientos.
Hoy en día, el Castillo de Monjardín conserva una sólida torre cuadrada, parte de los muros aspillerados y un aljibe abovedado de gran capacidad. La escalera de acceso data de 1300, y dentro del recinto se encuentra la ermita de la Santa Cruz, antiguamente dedicada a San Esteban. Según la tradición, en una hornacina del muro de la iglesia estuvo enterrado el rey Sancho Garcés.
Poéticamente, se ha comparado el castillo con una embarcación de piedra encallada en las nubes, debido a su altura y a las espectaculares vistas que ofrece. Desde su cima, se divisa una panorámica de 360 grados, con el río Ebro al oeste, la sierra del Perdón y Ujué al este y hasta las Bardenas Reales en el sur.
El castillo pertenece al Ayuntamiento de Villamayor de Monjardín y se destina a uso turístico. El acceso al exterior es libre, pero para visitar su interior es necesario pedir la llave en el Ayuntamiento o en el bar del pueblo.
El castillo está protegido bajo la Declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949 y por la Ley 16/1985 sobre el Patrimonio Histórico Español, lo que garantiza su conservación y promueve su valor histórico y cultural.
Villamayor de Monjardín es una localidad con encanto medieval, situada en pleno Camino de Santiago, lo que la convierte en un punto de interés para peregrinos y turistas. Además de su castillo, el pueblo destaca por su iglesia de San Andrés, con una imponente torre románica. La zona es también conocida por sus viñedos, que producen algunos de los mejores vinos de Navarra.
Con su impresionante legado histórico y su entorno natural privilegiado, el Castillo de Deyo sigue siendo una de las fortalezas más emblemáticas de Navarra, un testigo milenario de los avatares históricos de la región.