Cinco años de cárcel por violar en la Ciudadela de Pamplona a una chica menor de edad
Un joven de 21 años, vecino de Pamplona y natural de Brasil, ha sido condenado a cinco años de cárcel por violar a una chica menor de edad en la Ciudadela de Pamplona a la que acababa de conocer.
Los hechos tuvieron lugar en septiembre de 2021, cuando el ahora condenado tenía 19 años y la víctima 16. Ambos se habían conocido por redes sociales y acordaron verse por primera vez en un bar de Pamplona, a donde la chica acudió acompañada de una amiga.
Sobre las 22.00 horas, la amiga se despidió y los dos jóvenes se dirigieron al parque de la Ciudadela de Pamplona, a una zona de escaleras en la parte trasera de una conocida discoteca. Allí comenzaron a besarse y en un momento dado, según recoge la sentencia y se considera probado, "el acusado le propuso a la menor que le realizara una felación, lo que ésta rechazó, llegando, no obstante, a cogerle el acusado de la cabeza y a aproximarla hacia su zona genital, rechazándolo ella".
A continuación y de forma agresiva la violó en varias ocasiones pese a que la menor le dijo de manera repetida que parara.
Tras la agresión, el joven la invitó a su casa pero temiendo que iba a volver a ser violada, la chica contactó con un amigo pidiéndole que la llamara por teléfono haciéndose pasar por su padre y que le dijese que le estaba esperando para llevarla a casa.
En el reconocimiento del hospital, los médicos observaron heridas en el codo, rodillas y partes íntimas de la menor. Además, un equipo de psicólogos apreciaron credibilidad y veracidad en su testimonio. Desde el momento de la violación y hasta la actualidad la joven ha precisado tratamiento psicológico por lo ocurrido.
En su sentencia, la Sección Primera de la Audiencia de Navarra condena al joven brasileño a cinco años de prisión por un delito de agresión sexual, en la que el tribunal sentencia que las relaciones sexuales no fueron consentidas por la multitud de pruebas presentadas y la declaración de la menor, testigos, médicos y psicólogos.
Además, le imponen una orden de alejamiento de 300 metros durante ocho años así como una indemnización de 25.000 euros.