Los dos jóvenes que abren una tienda en Pamplona de arreglo de calzado: "Estamos encantados"
El barrio de San Juan en Pamplona cuenta con una nueva tienda de reparación de calzado y copia de llaves. Se trata de 'Hidalgo Anariba', que ha abierto sus puertas en la última semana del mes de diciembre.
Esta tienda está situada en la calle San Alberto Magno 1, en el mismo local que ocupaba la Herboristería Todo Natural que dirigía Xabier Sanz, que tuvo que dejar de trabajar en ella por una alergia que sufría, precisamente, a los productos que vendía.
La tienda de arreglos de calzado Hidalgo Anariba está muy cerca de otros establecimientos que hemos conocido en este apartado de comercio local en la capital navarra, como la tienda de pastas Fermín, o el bar El Pilar que busca nuevo dueño tras casi veinte años.
El boliviano Fernando Cossio Toledo de 25 años y la hondureña Françoise Sánchez Lizardo de 21 años se han lanzado a la aventura de abrir la nueva tienda, cuyo nombre lleva los apellidos de sus abuelos. Fernando lleva en Pamplona desde los seis años y su compañera desde los ocho años.
Han abierto el local hace muy poco tiempo y están en alquiler: "Íbamos a coger una zapatería en el casco viejo de Pamplona pero no llegamos a un acuerdo con el propietario que se jubilaba. Como teníamos hecho todo lo de autónomos y la sociedad nos decidimos a adquirir la maquinaria. Vimos este local en un barrio bueno y abrimos el 17 de diciembre".
La gente del barrio de San Juan les ha acogido "bastante bien. Sobre todo que ven el trabajo, les ha gustado y nos dejan hasta bolsas llenas de zapatos. Estamos encantados del buen comienzo. Al principio cuesta empezar porque la gente aún no te conoce", explican.
"Nos han dado la bienvenida. Cuando aún estábamos limpiando el local la gente ya nos preguntaba qué tipo de tienda íbamos a abrir. La gente está contenta y nos decían que bueno que ha regresado un zapatero al barrio. Nos han comentado que el último zapatero del barrio, Sánchez, se jubiló hace unos años", indican.
Fernando y Françoise reconocen que tienen un público "generalmente mayor y muy familiar que son más del boca a boca". Fernando estudió electromecánica industrial aunque no pudo trabajar en ello y terminó en una empresa que se dedica a la reparación de calzado en Pamplona.
Al final "como el que no quiere la cosa" se ha lanzado por su cuenta a montar esta tienda "donde hacemos también duplicado de llaves, mandos a distancia, cambio de pilas, cosidos, correas, reparación de cuero y calzado, y queremos añadir la reparación de relojes para cambiar los cristales y los engranajes", aseguran los nuevos dueños.
También tienen pensado añadir "la cerrajería en sí porque de momento nos centramos solo en hacer copias y queremos poder abrir bombines y cerraduras de los vehículos. Queremos profundizar un poco más lo que hacemos hasta ahora", señala Fernando.
Además, están muy cerca de la conocida calle Martín Azpilcueta "que es como la avenida Carlos III pero un poco más pequeño. Una zona con mucho comercio local y además peatonal. Esperamos que nos vaya bien porque aún estamos con un poco de miedo", concluyen Fernando y Françoise.