Un día me miré y me vi confinado, cogí unos libros y sentí un impulso por pintar sobre ellos, hoja a hoja, leyendo las pinturas sobre las que pintaba.
- jueves, 18 de abril de 2024
- Actualizado 16:35
Cómo si fuera un mantra, me viene a la mente ese “mientras tanto, arte” del que hablaba en mi último artículo aquí. Y lo hace en un contexto complejo y lleno de incertidumbre. Nuestra civilización confiaba en lo que había entendido como una certeza, esa visión de que el progreso venía acompañado de mejora constante. Ahora se rompe todo hacia atrás y nos retraemos al pensamiento contrario, aquel de que cualquier pasado fue siempre mejor. Y yo me resisto y pienso en las acciones que me evaden de ese lugar, y entre ellas está algo que considero trascendental: repensarme en el arte y en el tiempo que sucede “mientras tanto”, mientras pienso en arte.
—Espera un momento, vas a a hablar de arte ahora, crees que es el momento, con todo lo que ha sucedido, y todo lo que se ha perdido y se va a perder, ¿no crees que el arte es ahora accesorio?
— Igual no me he explicado bien, es justamente ahora cuando veo más importante pensar en arte y el tiempo que empleamos en recrearnos desde ahí, en esos “mientras tanto” en los que nos hablamos internamente de lo que vemos. Ya te dije que es un concepto en el que que describo el proceso introspectivo que nos sucede cuando contemplamos, y en mi viene enfatizado cuando lo práctico como artista: pum, pum resuena dentro de mi.
—Pensaba que en este artículo me dirías cómo ves el futuro de los museos, de las galerías, del mercado, de los artistas…
—No soy un visionario, y no sé qué va a deparar el futuro, pero sé que el arte va a seguir entre nosotros, y simplemente prefiero pensar en todos los “mientras tanto” cuando vemos arte, también ahora, como una nueva salida.
—¿Puedes desarrollar esto?
— En los más de dos meses que llevo de confinamiento aquí en Madrid, se han expandido esas sensaciones de la potencia del arte, sólo podía ver obras en los libros que tengo en casa, y esa distancia parece haberme llevado a otro lugar, precisamente menos materialista en mi experiencia de qué es ver arte. He leído las obras que aparecían en esos libros.
—Ya, pero he visto que has pintado sobre esos libros y esas obras
—Un día me miré y me vi confinado, cogí unos libros y sentí un impulso por pintar sobre ellos, hoja a hoja, leyendo las pinturas sobre las que pintaba. Es como si estuviera en una nave espacial, sin más materiales que ese maletín de decenas de botes de pinturas que me regaló mi amigo Fermín hace años, y mis libros de arte.
-Pero ¿por qué sucedió esto? podías haber comprado hojas en blanco, ¿no?
-No te sabría decir qué sucedió, simplemente ahora pienso que quería tener “mientras tantos” desde lo que tenía en mi confinamiento, lo demás era para mí accesorio, quizás fue una forma de reformular cosas y enfatizar el punto desde el que partía en este momento, y vivir ese tiempo concreto y esa circunstancia que nos ha rodeado a todos.
-He leído que has titulado a esta serie de pinturas #ysilapinturanovolvieraaserlomismoya, ¿piensas que la pintura no volverá a ser lo mismo ya, valga la redundancia?
-Mi amiga Elena Asins decía que lo que le interesaba del arte era el proceso, y no la obra terminada, pues igual aquí me pasa lo mismo, no sé cómo será mi pintura después, o la pintura y el arte en general, pero soy consciente de que el arte es un acto de resistencia enfatizando un “mientras tanto”.
Entiendo entonces que es como si de alguna forma se hubiera amplificado y simplificado ese tiempo que reclamas en arte, o igual una forma de reafirmar que el arte es más necesario que nunca.
Sí, mientras tanto…
- …. Arte
Dedicado a mi tío Angel. Fallecido en Tudela, Navarra, en el mes de abril, por causas derivadas de la infección de corovanirus, una persona inteligente, sensible y constante, que aún y todo, seguro que pensó al final de su vida que el futuro será de forma necesaria mejor para todos, también para nuestros mayores, y que me habría dicho: sigue.
