• viernes, 29 de marzo de 2024
  • Actualizado 13:38

Opinión / Tribuna

¿Se cambiará también el nombre a la avenida de Pío XII?

Por José Luis Díez Díaz

El autor critica los cambios urbanísticos y del tráfico de la vía que indignan a todos los colectivos, desde los vecinos hasta los conductores.

Fotomontaje de la avenida Pío XII con la imagen del alcalde Joseba Asirón durante la visita oficial a unas obras en Pamplona NAVARRACOM
Fotomontaje de la avenida Pío XII con la imagen del alcalde Joseba Asirón.

Están dando los últimos “brochazos” a la eufemística intervención urbanística en la avenida, actualmente llamada Pío XII, que como sentenció sobre España al llegar al Gobierno un conocido político “no la va a conocer ni la madre que la parió”, y mi temor es que al nimbado de turno pamplonés no se le ocurra cambiarle el nombre. A lo mejor es darle una idea, pero ya qué más da, sería el remate al auténtico disparate de una de las últimas actuaciones, es mi deseo, de este desgobierno municipal.

Estoy seguro que un equipo técnico en sus cabales y no mediatizado o con expreso mandato interesado es incapaz de proyectar o adoptar soluciones como las que se pueden observar en el nuevo trazado y disposición de la citada avenida y sus cruces, como por ejemplo las paradas de villavesas. Los pasajeros deben bajarse a una plataforma intermedia y, tras esto, cruzar un inesperado carril bici para poder incorporarse a la acera. Peor se torna imposible si es un coche de niño o silla de ruedas de minusválidos.

Otro de los desatinos que salta a la vista es la colocación de pivotes delimitando caprichosas figuras curvilíneas, dignas de un slalom deportivo, pensados para dificultar la circulación a los vehículos de cuatro ruedas y facilitar que las bicicletas tengan carril continuo, eso sí, parece que ahora por las aceras “circulan mucho mejor y más seguros” que junto a la calzada.

Y puedo seguir mi enumeración. Peculiares minipasos de cebra sobre carril bici para acceso a los contenedores de basura (no sé a cuál de ellos); todo un detalle. Estacionamiento de minusválidos en unas nuevas zonas delimitadas con pintura, en las cuales el conductor sale a una calzada más estrecha y, superada esa primera prueba, debe incorporarse a la acera salvando otra vez el ya mencionado carril bici. Buena suerte.

Ampliaciones, que no entiendo, de aceras con bonitas figuras y rincones ajardinados, donde quizás los drones puedan tomar tierra (creo que hay convocado un curso-examen en Pamplona) y donde patinetes y otros inventos podrán discurrir a su libre albedrío y a más velocidad.

Modificaciones de circulación en las intersecciones que producen dificultosas maniobras al coincidir los coches con los autobuses y villavesas. Esto provoca embotellamientos. Considero que una cosa es reducir/ralentizar la velocidad, y otra tener que ver coches en las aceras para dejar pasar a las ambulancias, con el consiguiente incremento de ruido de sus sirenas en el paso casi obligado hacia el Complejo Hospitalario de Navarra.

Una significativa reducción de plazas de aparcamiento en superficie con perjuicio directo para comerciantes, servicios y vecinos con tarjeta de residente. Y la enumeración podría ser casi infinita… defectos técnicos, salida de aguas en rincones, estado de bordillos, rampas, etc.

Pensaba que nuestros representantes municipales (concejales de gobierno) estaban para velar por el bien común, en este caso la generalidad de vecinos y usuarios habituales, y estos días he comprobado paseando, haciendo algunas fotografías, que la indignación es no solo de nosotros, los vecinos, sino también de ciclistas, conductores, comerciantes, viandantes…

Si todo hubiera sido pintura y mínimo gasto, el remedio de esta “gamberrada” hubiera sido menos gravoso, pero la obra de fábrica ejecutada (bordillos, isletas, jardines, bolardos, plataformas de parada de villavesas…) no tiene otra solución que destruirlos y volver todo a su primitivo estado (o a otro mejor).

Si a la vuelta de unos meses, Dios lo quiera, otros ediles con sentido común deciden otra solución más racional, consensuada con todos los interesados y protagonistas, y aceptada por la mayoría, ¿exigiremos algún tipo de responsabilidad a los autores de esta presunta malversación o administración desleal de caudales públicos, cuantificable en unos dos millones de euros, a los que habría que añadir el importe de la necesaria e inmediata intervención (racional) urbanística?


  • Los comentarios que falten el respeto y que no se ciñan al tema de la noticia, podrán ser eliminados.
  • Cada usuario será el único responsable de sus comentarios.
¿Se cambiará también el nombre a la avenida de Pío XII?